Boletín de Hospitaleros Voluntarios, Nº 106, MAYO 2021

Por Daniel Paniagua Díez

In memoriam:

Otro adiós, escribí desolada en el whatsApp de un amigo que compartió conmigo tantos años, días, trabajos y risas con Edita.

Edita acababa de cumplir 49 y con ella se va la memoria del resurgimiento de un lugar

como Cebreiro y la memoria de cómo se acogía antes de que las normas lo esterilizaran todo.

Siempre dispuesta, trabajando más horas de las que su exigüo sueldo obligaba…dejando 

hacer a los hospitaleros voluntarios, muchos con más pretensiones que sentido común.

Su tímida sonrisa y su humildad no dan idea de que se (nos) ha ido una figura histórica de esta nueva edad del Camino de Santiago. Descanse en paz.

FE DE ERRATAS

En el anterior boletín de Hospitaleros, el número 105, se hablaba del crismón que la FEAACS ha adoptado para celebrar el Año Santo Compostelano 2021.

Y había una errata. No se halla en Jaca sino en León. Aprovechamos que hay que dar cuenta

de este error para ampliar la información sobre el crismón adoptado.

Es una pieza que se encuentra en el Monasterio de San Isidoro de León, crismón circular, 

trinitario. Ocho brazos de filete de junquillo, patados en sus extremos y doble aro marco,

interior ornado con contarios y el exterior de bocel, separados por una caña alta.

Conserva restos de policromía de almagre en las superficies planas. Las letras muy cercanas a las primitivas piezas aragonesas. La P de vano redondo algo estirado por la parte inferior,

presenta claras semejanzas de trazo con el jaqués, al igual que la Omega de la lira normal y

Alfa recta, con vértice; ambas patadas, pinjantes y desgajadas de los brazos. Éstas,

permutadas de posición, revalidan además el carácter funerario del crismón situado en la

puerta del primitivo nártex que daba acceso al actual panteón real ricamente decorado. La S,

simétrica, oblicua, muy sinuosa, robusta y enroscada al brazo, se aproxima a la de San Pedro el Viejo de Huesca. Si nos fijamos con detalle en el crismón de León, así como en el de Bossost (Lérida) y de Mallén (Zaragoza) advertimos un hecho común a los tres: la inversión de la situación de los símbolos apocalípticos alfa y omega. Lo ortodoxo es "el principio y el fin", "alfa y omega". Y cuando se esculpe "el Fin y el principio", o sea Omega y Alfa, no es un error del escultor, sino que simboliza la muerte física antes de la resurrección que vendrá con la Parusía. Es posible que señalasen el acceso a lugares de enterramiento o panteones, como en el caso de San Isidoro o sobre la portada de salida al cementerio ubicado junto al templo. Ubicación: Puerta interior, a los pies de la iglesia

Hospitaleros que se van despidiendo

Debía participar en abril 2020 en Estella con mi amigo Francis Tabary, pero la pandemia ha

llegado. Era para mí, pienso, la última participación como hospitalero; ahora, con 83 de edad, pienso que es el tiempo para mi y por desgracia, del retiro.

traduciéndolo para mi asociación en Francia.

Pasará la pandemia y continuará el Camino.

Un abrazo

Alain Le Stir

BOLETÍN INFORMATIVO Nº CVI

En un goteo, de vez en cuando, llegan correos de hospitaleros que se despiden. No son

muchos pero sí suficientes como para establecer un tipo: peregrinos que disfrutaron de la

posibilidad de ser hospitaleros y ejercitar la hospitalidad que, conscientes de su decadencia

física por cuestiones de edad y, por lo tanto, sabedores de que su tiempo en el Camino, en los albergues, ha pasado.

A diferencia de Alain, otros desisten de ser hospitaleros pero piden que no mantengamos

contacto ya con ellos a través del boletín mientras otros nos dicen que no los olvidemos. Son diferentes maneras de decir adiós. Algunas veces, cuando se dan estas situaciones, nos

dolemos por no tener la capacidad para hacer o tener una agradecida despedida más allá de

intercambio de los correos electrónicos.

En la base de datos Hospitaleros están registrados hospitaleros de los que hace mucho tiempo no tenemos noticias. Cuando la repasamos entre Maite, Marta y yo y topamos con algunos nombres pensamos que incluso puede que ya no estén entre nosotros. Por eso, cuando las familias de hospitaleros fallecidos se ponen en contacto y nos hablan de su familiar para comunicar que murió y de cuánto le gustaba el Camino y la hospitalidad, nos sentimos parte de esa familia. Como lo ha hecho Alain avisando a su familia hospitalera de que no volverá al Camino como voluntario pero que nos quiere junto a él.

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Y no iremos más a Nájera

No lo haremos; con muchísima pena lo escribimos y por cómo se han sucedido los hechos. Por hacerlo “elegante”: la pandemia deja víctimas fuera de lo propiamente sanitario como todos sabemos; también en lo que respecta a los albergues. La Asociación de Amigos del Camino de Nájera entregó las llaves del albergue a su propietario, el Ayuntamiento. Y este gesto, sin avisarnos, ha supuesto que Hospitaleros voluntarios después de más de 20 años colaborando con ellos, no pueda atender el albergue. Lo hacíamos desde que se acogía a los peregrinos en un edificio anejo a la Colegiata Real y, hasta el 10 de marzo de 2020 cuando la pandemia cerró el albergue, allí estuvimos. 

Cuando en el verano pasado se hicieron tímidas aperturas, nos ofrecimos a abrir y aplicar las medidas de obligado cumplimiento porque la Asociación no se atrevía, pero no se oyó nuestra disposición. Nadie nos avisó de que la Asociación no volvería al albergue, nadie avisó al Ayuntamiento que Hospitaleros mantenía abierto el albergue 365 días al año y nadie contestó a las múltiples llamadas que hicimos al Ayuntamiento para hablar con ellos en una flagrante falta de profesionalidad. Cuando el Municipio buscó abrir el albergue, el nuevo grupo no tuvo reparos a no comentar siquiera que sabían que nosotros atendíamos allí.

Hace tiempo que se ve este tipo de movimientos en el Camino para “hacerse” con los

albergues aunque detrás esté el trabajo de mucho tiempo y de mucha gente.

Quizá la “culpa” de todo esto sea de Hospitaleros voluntarios –me resisto a que seamos solo

HOSVOL cuando nos llamamos como nos llamamos (véase la cabecera de este boletín)- digo que sea nuestra culpa por mantener un perfil plano en el Camino, ya sabéis: “no ser la lámpara del albergue” y “hacer nuestro trabajo y, como la sal, desaparecer”. Quizá ha llegado el tiempo de los codazos y del “porque yo lo valgo (más)”.

Algo así ha pasado con nuestros compañeros de Accoglienza Pellegrina, nuestros hermanos

italianos. Les han informado que no atenderían más el albergue de Pieve de’Saddi en el

Camino de San Francisco porque fue entregado a otra organización. Por el contrario aportan

una nueva noticia: comenzarán a acoger a los peregrinos que transiten por la Vía Francígena y lleguen a Pietrasanta. Lamporo, Vercelli y Valpromaro seguirán siendo atendidos por los

hospitaleros voluntarios de Accoglienza Pellegrina.

TRES ENCUENTROS POR ZOOM +2

Desde el último boletín, el de marzo, se llevaron a cabo los tres encuentros que se propusieron entre hospitaleros vía Zoom. Maite Moreno abrió la temporada, siguió María Martínez con su ArbolAndo que reúne cada 15 días a un grupo de hospitaleros y terminó con Ana Martínez,

Fernando Gimeno y José Ángel Pérez Galán en una conexión a tres bandas. Hubiéramos

esperado más hospitaleros reunidos puesto que la aplicación lo permite –por cierto, con un

sincero agradecimiento a Yolanda García Peñalvo por estar al mando técnico- pero las charlas fueron del agrado de los asistentes. Marinella Locatelli, durante el encuentro con Maite hizo la siguiente reflexión: Una consecuencia de la pandemia por COVID-19, un efecto secundario, son los encuentros entre hospitaleros de manera telemática. La COVID-19 nos ha paralizado pero también nos ha dado la oportunidad de pararnos, mirarnos y reconstruir nuestra historia como grupo. Creo que de estas palabras surge la propuesta de un reencuentro para trabajar sobre esto. ¿Nuevas citas?, repetiremos seguro.

Y mientras, Marina Saiz continúa con sus Encuentros en el coro de Grañón y Tom Friesen con la reunión de hospitaleros cantarines a los que dirige desde Canadá.

Este último grupo de hospitaleros ha confeccionado un cancionero que os adjuntamos en otro archivo. Ribas Vidal, un hospitalero brasileño, ha hecho este trabajo de recopilación y nos advierte que la melodía y las letras NO tienen copyright, entonces podéis compartir con los hospitaleros y peregrinos, dice Ribas.

De Camino, albergues y pandemia. De voluntarios suficientes…o no

Al momento de escribir este boletín, el estado de Alarma ha decaído hace unos días. Y los

hospitaleros que están en los albergues ahora, los que terminaron en abril y los de la primera

quincena de mayo dan noticia de que algo se mueve. Un ejemplo: en Zamora en el mes de

abril se alojaron 3 peregrinos; en la primera quincena de mayo fueron 12. El calendario de

vacunas está siendo cumplido y todo parece señalar que hay que seguir siendo muy

precavidos con la enfermedad pero se otea un cierto optimismo. Iremos viendo cómo el número de peregrinos que llegan a Santiago va en aumento.

Los albergues que atendemos seguirán en su mayoría cerrados. Preguntados en febrero,

algunos tenían decidido que no abrirán hasta 2022, otros han esperado hasta hace muy pocos días para decidir esto mismo. Se ha dado el caso de haber decidido abrir y luego cambiar de idea y dejarlo para el próximo año y también el caso contrario: testar en el mes de junio el paso de peregrinos y la situación de la pandemia y contemplar abrir en julio. Mientras todo esto ocurre, en realidad son solo 6 albergues los que estarán abiertos el día 1 de julio.

Se mantienen las medidas que se adoptaron en 2020 en cuanto a distanciamiento, límite de

plazas, medidas higiénicas y de desinfección, toma de temperatura y mascarillas. No hay, por ahora, normas en contrario y nos tememos que podrán variar de acuerdo a la comunidad

autónoma en la que el albergue situado.

Como sabéis, en 2020 hubo que cancelar todos los cursos para nuevos hospitaleros y en 2021 no se convocaron. A las personas que se interesaron y siguen interesándose este año por ser hospitaleros les explicamos que al ser imposible llevar a cabo los cursos de manera presencial y no haber demanda de hospitaleros por mantenerse los albergues cerrados, no se

convocarían cursos. No hay, por lo tanto, hospitaleros novatos para cubrir las necesidades que puedan tener los albergues.

Los hospitaleros extranjeros, los hospitaleros que no pertenecen al Espacio Schengen o a la

UE tienen por ahora más dificultades para entrar a España aunque todos deben cumplir con lo exigido. Estas normas, vigentes en mayo, cambiarán poco a poco y serán los hospitaleros no españoles los que hayan de estar pendientes de qué es lo que se exige en cada momento para entrar en España o lo que sus países de origen exigirán a la vuelta de España. 

Muchos hospitaleros están preguntando por cómo vemos la posibilidad de venir en verano, en otoño…y nadie tiene una bola de cristal.

Hay una pequeña bolsa de hospitaleros que ya están siendo destinados en los albergues. Pero necesitamos que haya algunos más porque no es sencillo hacer coincidir las quincenas que se ofrecen con el número de albergues abiertos o sus características. Por eso, os animamos a que volváis, a que ofrezcáis un poco de vuestro tiempo.

Nota bene: mientras se redactaba y componía este boletín, se llegó al acuerdo de atender el albergue de peregrinos de San Vicente de la Barquera.Una puerta se cierra, una puerta se abre.

Daniel Paniagua Díez