Os comento que esta receta la hicimos con una de las últimas "tandas" de calabacines que recogimos antes de irnos de vacaciones pero como teníamos muchas recetas atrasadas no hemos podido subirla hasta ahora. Bueno, os pongo un poco en situación de porqué este plato. Todo surgió una tarde, cuando mi marido entraba por la puerta de casa con una banasta de calabacines recién cogida de su huerto y me comentaba alguno de los platos podían hacer con estos. Uno de ellos fue este, el cual me llamó mucho la atención porque hacía años que no lo preparaba, y nos pusimos manos a la obra para sacar la receta y prepararla.
INGREDIENTES:
- 1 Calabacín mediano
- 3 huevos
- Pan rallado
- Sal
- Pimienta negra
- 2 cucharaditas de levadurina
MODO DE HACERLO:
- Pelamos el calabacín y lo rallamos.
- Lo salpimentamos al gusto, añadimos los huevos y batimos.
- Agregamos la levadurina, un poco de pan rallado y dejamos reposar unos minutos, tras los cuales si vemos que queda muy líquido añadimos más pan rallado hasta formar una masa blanda pero no líquida.
- Con ayuda de dos cucharas tomamos porciones de la masa y las freímos en abundante aceite caliente hasta que estén doradas. Las ponemos a escurrir en papel absorbente y ¡YA ESTÁN LISTOS PARA COMER!!!!
- Pensamos que este plato también podría quedar muy bien agregándole patata frita a la masa. Todavía no hemos probado esta variación, pero en cuanto lo hagamos os diremos que tal está. Mientras, os invito a que lo comprobéis vosotros/as mismas y nos deis vuestra opinión.