Después de la primera ola, solo la oscuridad permanece. Después de la segunda sólo el que tiene suerte escapa. Y después de la tercera, sólo los que tienen mala suerte sobreviven. Después de la cuarta ola, sólo una regla se aplica: no confíes en nadie.
Ahora, es el amanecer de la quinta ola, y en un tramo solitario de la carretera, Cassie huye de ellos. Los seres que sólo parecen humanos, que deambulan por el campo, matando a cualquiera que ven. Quiénes han dispersado a los últimos supervivientes de la Tierra. Permanecer sólo es seguir con vida, Cassie lo cree, hasta que conoce a Evan Walker. Cautivador y misterioso, Evan Walker puede ser la única esperanza de Cassie para rescatar a su hermano, o incluso a sí misma. Pero Cassie debe elegir: entre la confianza y la desesperación, entre el desafío y el rendirse, entre la vida y la muerte. Abandonar o levantarse.