Brasilia, la modernidad desmejorada

Por Flipaser
Cuánta gente cree que la capital de Brasil es São Paulo o Rio de Janeiro? Esta mole de cemento en mitad del ecosistema de cerrado en el centro del país nos enseña cómo la planificación urbana influye en la vida de las personas. 
Esta gran ciudad fue diseñada desde la nada en 1956 e ideada por Lúcio Costa y Oscar Niemeyer, bajo el mandato del presidente Kubitschek, que dio todo el apoyo económico necesario. La tendencia socialista de la época diseñó este monstruo con orientaciones hacia la arquitectura y la planificación urbana comunistas, pero con un toque futurista bastante interesante. 
En esta ciudad existen bloques hoteleros, donde se encuentra todo el sector turístico, bloques residenciales con sus zonas comerciales al lado, bloques empresariales, donde se concentran todas las oficinas. Bastante diferente al concepto de ciudad que usamos en Europa o en América. Interesante para la practicidad del día a día, pero un poco extraño encontrarse sectores completos de la ciudad vacíos durante la noche (qué ocurrirá a las 3 de la mañana en los bloques de oficinas??). Igualmente, tampoco puedes reservar un hotel que quede cerca de la oficina en la que vas a estar trabajando porque todos los hoteles están en estos sectores hoteleros. 
Funcional o no funcional, lo más impresionante es pensar que todo esto se creó de la nada y se trasladó la capital a este lugar en mitad de ninguna parte. Actualmente los edificios futuristas quedan un poco extraños, sobre todo considerando las fuertes lluvias y los calores excesivos que hay en esta zona del país, lo que hace que todo tome un tono entre gris y descascarillado con humedad. 
Me gustó sobre todo pasear por el eje monumental y visitar la catedral de Brasilia, la plaza de los tres poderes, el complejo cultural de la república, el palacio presidencial (de Alborada) o el monumento a JK (Juscelino Kubitschek) y a su lado el último coche presidencial que utilizó con matrícula 0001 (primer vehículo matriculado en la ciudad). 























Para concluir, fuimos a visitar el Parque Nacional de Brasilia, muy interesante por estar al lado de la ciudad, y con una buena representación del ecosistema de cerrado, que además provee gran parte del agua potable de la ciudad. Lamentablemente la mayoría de la ciudad lo conoce como "agua mineral" y es donde van a bañarse los fines de semana masivamente en familia.