Dirección: Steven Spielberg.
Intérpretes: Tom Hanks, Mark Rylance, Amy Ryan, Sebastian Koch, Scott Shepherd, Billy Magnussen, Alan Alda, Jesse Plemons, Eve Hewson, Peter McRobbie, Austin Stowell, Domenick Lombardozzi, Michael Gaston.
SinopsisEl personaje interpretado por Tom Hanks (James Donovan) es un abogado de Brooklyn que ha de defender a un ciudadano soviético, acusado de ser un espía y ejercer como tal en el país de las barras y las estrellas. Es así como el abogado se adentra en el gélido mundo del espionaje en plena Guerra Fría y que desembocará con el abogado neoyorkino negociando un intercambio de prisioneros con los servicios secretos soviéticos y las autoridades de la República Democrática de Alemania en el mismísimo Berlín oriental.
OpiniónTras muchas semanas (y meses) sin poder acercarnos a una sala de cine, en los últimos días hemos podido sacar un hueco para pasarnos por una madrileña sala y saborear cualquier cosa que fuese posible ver. Así, tal cual, sin criterio (bueno, alguno sí...). Había necesidad.
La cartelera y el horario nos encaminaron hacia Bridge of Spies, la última cinta dirigida por Steven Spielberg. Y su mano se nota. Desde un punto de vista técnico, la cinta es impecable. El director americano sabe narrar, dirigir y plasmar las historias que decide llevar a la gran pantalla como pocos lo saben hacer. Sabe utilizar el primer tramo de la película para crear la atmósfera necesaria para que el espectador se sienta partícipe de lo que está viendo. Ese tramo inicial es estupendo; ese thriller judicial consigue atraparte. No obstante, bajo nuestro escaso criterio, el film va de más a menos, y después de esos 30-40 primeros minutos, la película se convierte en un ligero thriller de espías que languidece, hasta llegar a un final en el que la tensión hace que el interés se recupere y la ansiedad por conocer el desenlace te embriague.
Muy reconocibles ciertas constantes en la filmografía del director, como son el cuidado de los detalles, su "excesivo optimismo", su pasión por los "finales felices" y algunas dosis de patriotismo; éstas, le sobran. No le suman nada y si acaso, le restan.
En cuanto a lo interpretativo, prácticamente todo el metraje recae sobre los hombros de Tom Hanks. Ese actor amable y "sobre-expuesto" que se nos hace un poco "cansino", aunque hay que reconocerle, que al igual que el director, despliega todo su buen hacer de veterano.
Como conclusión decirles que se trata de un film delicado, fino, amable y entretenido que bien merece pagar una entrada de cine para disfrutar de ella. Sin lugar a dudas.
Nota general: 5,5 sobre 10.
Vídeo promocional