¿Qué es la BRONQUIOLITIS?,
Es una infección aguda, producida por un virus que afecta a las vías respiratorias inferiores, es decir, a los bronquios y bronquiolos, que son los conductos a través de los cuales entra el aire en los pulmones.
Estos se inflaman por la viriasis y se estrechan, lo que dificulta la entrada del aire. El resultado lo podemos ver en esta sugestiva imagen…
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En un alto porcentaje, el responsable es el virus respiratorio sincitial (VRS), aunque también puede deberse a otros agentes, como el virus del resfriado común o el de la gripe, entre otros.
Lo más importante es que la enfermedad suele remitir espontáneamente entre los tres y los siete días. Esta enfermedad se concentra en los meses de invierno y al principio de la primavera.
La bronquiolitis:
- Afecta con mayor frecuencia a lactantes y niños pequeños porque sus vías respiratorias, de tamaño más reducido, se obstruyen con más facilidad que las de los niños mayores y los adultos.
- Típicamente se da durante los dos primeros años de vida, con una máxima incidencia entre los tres y los seis meses de edad.
- Es más frecuente en los bebés y niños de género masculino, los que no se han alimentado con leche materna y lo que viven en condiciones de hacinamiento.
La asistencia a guarderías y la exposición al humo del tabaco también pueden incrementar las probabilidades de que un bebé o un niño pequeño desarrolle una bronquiolitis.
Aunque suele tratarse de una enfermedad leve, algunos bebés corren el riesgo de enfermar de gravedad y requerir hospitalización. Los factores que aumentan el riesgo de desarrollar una bronquiolitis grave incluyen el nacimiento prematuro, padecer previamente una enfermedad pulmonar o cardíaca crónica y tener un sistema inmunológico debilitado por enfermedades o medicamentos.
Los niños que han padecido bronquiolitis tienen más probabilidades de desarrollar asma más adelante, pero todavía no está claro si la bronquiolitis provoca o desencadena el asma o si los niños que desarrollan asma cuando son mayores simplemente eran más proclives a desarrollar bronquiolitis durante la lactancia. Se están realizando estudios para aclarar la relación existente entre la bronquiolitis y el posterior desarrollo del asma.
¿Cómo aliviar sus síntomas?
- Mantener la nariz limpia de secreciones y mucosidad, hacerle unos buenos lavados a base de suero fisiológico o agua de mar y con aspiradores nasales, sobre todo en los bebés más pequeños.
- A la hora de dormir, colócalo ligeramente incorporado.
- Ofrécele abundante líquido para que se le ablande la mucosidad.
- Evita el uso de los humificadores. No son aconsejables si el problema es la bronquiolitis, ya que el agua puede irritar los bronquios. Aunque sí son útiles en niños que sólo padezca congestión nasal.
Intenta no exponerlos a agentes irritantes de las vías respiratorias, como pinturas u olores fuertes, el polvo y, sobre todo, EL HUMO DEL TABACO.
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