Bruselas, la patria del cómic

Publicado el 13 marzo 2013 por Isidro Lopez Arcos @1Sorokin


Tengo que haceros una confesión, queridos lectores. Nada mejor para confesarse, que unos días en los que los moratones... Oh, perdón, los cardenales, están encerrados para elegir un nuevo papa. Así es que, haciendo acto de contrición, os confieso que desde los tebeos del Capitán Trueno, Crispín, Goliath y, sobre todo, la bella Sigrid (que tiene una gran parte de la culpa de que yo me haya exilado de la tierra que me vió nacer, buscando vikingas como un poseso), digo, que desde que dejé a tan ilustres gentes, no me ha interesado el cómic en demasía. No quiere ello decir que no haya seguido los cómics de Robert Crumb,  las hazañas de Astérix o del Capitán Haddock. Pero nunca me puse a profundizar en el tema. De todas formas, tengo a mi capitán y sus congéneres guardando un estante de mi librería. Tintín me cae bastante gordo, pero Haddock es como mi "alter ego", ¡por todos los truenos de Brest!.

Hace unos días, leyendo un post de Not Hemingway Spain sobre el cómic en Valencia y, en general el cómic español, me dije... pero.. leñes, Sorokin, si Bruselas pretende ser la capital mundial del cómic, infórmate un poco, hombre de Dios. Así es que os vais a tragar (si tenéis ganas, si no, apagais y os vais a tomar unas cañitas en el bar de abajo) el resultado de mis pesquisas.
Para empezar, hay que decir que en Bruselas hay un auténtico culto al cómic, la "BD" (bande dessinée) como se dice en francés. Cualquier librería tiene una zona dedicada nada más que a los cómics. Esta foto está hecha en una librería de barrio (del mío, sin ir más lejos). No es una librería especializada, y, ya veis los estantes que tiene:

Siempre podéis encontrar en el rincón del cómic a alguien, generalmente joven, sentado en en el suelo y leyendo algo de lo que está en exposición. Eso dice mucho de la tolerancia bruselense  (si hace eso en cualquier librería alemana, lo expulsan en un plis plas, y no exagero, que lo he visto con estos ojitos).
En Bruselas, además, los cómics están en la calle. En los años 80 Bruselas estaba sufriendo un proceso de lo que aquí se llama "bruselización" y que yo llamaría "madrileñización", destruyendo barrios enteros para edificar cosas "modernas", llevados por la fiebre constructora. Muchas paredes medianeras quedaron al descubierto. Otras medianeras estaban ocupadas por feos anuncios. Y en esto, ¡zas! llegó un concejal joven y propuso pintar con escenas de cómic todas las medianeras. Dicho y hecho. Se prohibió la publicidad en el entorno de la Grand Place y se empezaron los trabajos de los frescos murales. El más famoso es el que he puesto en la foto de cobertura. Está en la Rue du marché au charbon. En esa misma calle, prácticamente enfrente, está este otro:

Mi admirado capitán Haddock y el chiquilicuatre de Tintín están bajando una escalera al ladito de la Grand Place:

Admitamos, oh gentes, por otro lado, que el cómic es más antiguo que la literatura escrita. Y si no, vais a Altamira a ver las pinturas de las cuevas y comprobáis que no hay nada escrito, pero sí hay muchas historietas dibujadas, que si bisontes, que si osos, que si tíos que les tiran flechas, etc. Saltándonos Egipto, Grecia y otras antigüedades, llegamos a la edad media. Como dije hace un par de posts, me fascina la edad media. Se costruían enormes catedrales, pero el pueblo no sabía leer. ¿Cómo explicarles las cosas si no leían libros? (ya sé, malignos, que me vais a decir que ahora la mayoría tampoco lee, pero en fin, al menos los belgas leen cómics)... naturalmente, haciendo bellos bajorrelieves en las iglesias. A mí me encanta éste, que está en un lateral de la catedral de Reims:

No me digáis que no es autoexplicativo. Muy adecuado para estos tiempos de cónclaves y esas cosas.
Para completar mi formación cómica (no sé si se dice así, pero ya me entedéis) fuí a visitar el Centro belga del cómic (Centre belge de la bande dessinée). Está en una casa magnífica que fue diseñada por Horta como almacén de venta por departamentos:

La entrada cuesta 8 euros, así es que si váis, no os arruinaréis. Aparte una introducción como la que yo os he contado sobre egipcios, griegos, edad media y demás, hace honor en especial a los monstruos más conocidos del cómic, los padres de la "BD" belga: Hergé, el creador de Haddock (y Tintin, ea):



Y André Peyo, el creador de los Pitufos (les "schtroumpfs", the "smurfs"). En esta vitrina han reproducido el laboratorio de Gargamel, el enemigo jurado de los pitufos:

Mis amigos españoles reconocerán, sin duda, el utensilio que utilizaba el malvado Gargamel para sus encantamientos. Lo que no se sabe es si lo rellenaba de Priorato o de Valdepeñas.
Los padres de la BD belga se dividieron en dos líneas: la línea "clara", la de Hergé y la línea que se ha dado en llamar de "Marcinelle". El más conocido de los de esta linea es Franquin, el papá de Marsupilami, y de Gaston Lagaffe, aunque tambien creó unos cómics un tanto más agresivos. Me encantó éste:

Si no entendéis francés, el padre está abroncando al hijo porque tiene miedo de la oscuridad y no se atreve a salir. Le llama de todo y se va él al pozo, sin mirar lo  que le espera fuera, en la oscuridad.
Hay otro tipos de cómic que no son adecuados para un blog que se supone que es apto para todos los públicos. No están en el centro de la BD, pero están muy de moda. No os cuento más, que luego todo se sabe. Por ejemplo, éste: "los melones de la ira":
                               
Nada más por hoy, que ya estuvo suave, amiguetes. Si vais al centro de la BD, un consejillo. No vale la pena que crucéis la calle para ir al museo de Marc Steen. Es una casa interesante vista desde fuera:

Pero en el interior, no hay nada que valga la pena salvo, tal vez hacer la foto:
                                   
  Si queréis algo de comer, la Brasserie Horta es parte del Centro, pero cierran la cocina muy pronto:        
                                   
Y bueno, nada más por hoy, que ya os he dado bastante la brasa, oh amigos. No me resisto a poneros esta estampita para acabar. Ya sé que no es un cómic, pero da bastante que pensar, a ver quién manda aquí. Un besote


También podría interesarte :

Quizás te interesen los siguientes artículos :