Hoy les propongo preparar un budín (o bizcocho) húmedo, sabroso, con el dulzor justo y con el aporte de las semillas de chía (que son la fuente vegetal con mayor concentración de Omega3 - ácidos grasos esenciales que ayudan a disminuir el colestrol, proteger el corazón y mejorar los sistemas inmunológico y nervioso -; además, poseen antioxidantes naturales, vitaminas del grupo B, calcio, hierro, fósforo, potasio y magnesio).
Como si con ello no alcanzara, se prepara en un abrir y cerrar de ojos o, lo que es lo mismo, en un batir, mezclar y cocinar.
Aquí está la lista de ingredientes para que puedas realizarlo esta misma tarde.
¿Comenzamos? En un bol, batí 2 huevos (de campo, mejor) con 200 gramos de azúcar integral. Añadí 3 cucharadas de aceite neutro (girasol, maíz), una tapita de extracto de vainilla, 200 gramos de zanahoria rallada, 150 gramos de ricota (en mi caso, magra) y 30 gramos de semillas de chía (si no las conseguís, aunque bien vale la pena el esfuerzo, podés reemplazarlas por semillas de amapola o de sésamo).
Por último, agregá 200 gramos de harina leudante, tamizada con una pizca de sal y 1 cucharada de polvo para hornear.
Integrá los ingredientes y volcalos en un molde de budín previamente enmatecado y enharinado.
Cociná en horno moderado (170-180° C) por 40 minutos o hasta que, al introducir un palillo en la masa, éste salga seco y limpio.
Dejá enfriar antes de desmoldar y cubrí con una lluvia de azúcar impalpable.
En un rato tendrás listo un budín delicioso y muy sano, ideal para acompañar el té o el mate de la tarde. Pero, también, para arrancar el día con un desayuno sano, que aporta nutrientes y energía.
El resultado final: una miga esponjosa, húmeda y sabrosa, con un toque crocante (que aportan las semillas de chía) para un budín muy sencillo de preparar ¡y de comer!
Espero que les guste la propuesta y que la prueben en casa. Verán que es una manera fácil de hacer que los más pequeños - y no tanto - coman zanahorias de un modo distinto (si no desean que las descubran a simple vista, pueden rallarlas bien finitas para que se pierdan en la masa).Hasta la semana que viene. ¡Qué la pasen muy bien!