La mayor ventaja de Android es que, al ser un sistema operativo de código abierto, todo el que quiera puede contribuir a la plataforma incluyendo cambios o mejoras. La peor parte es que tanto operadoras como fabricantes tienen la manía de personalizarlo, ilo que impide a los usuarios disfrutar de un SO Android limpio en sus terminales.
Aún así, es interesante cuanto menos el rumbo que ha tomado Sony con su nuevotope de gama, el Xperia Z, tras el éxito del Xperia S como AOSP (Android Open Source Project). Dicho así, el Xperia Z contará con su propio AOSP, por lo que desarrolladores y entusiastas pueden contribuir al código de Android y a la plataforma Snapdragon S4 Pro de Qualcomm. Para ello tan sólo tendrán que instalar Android Vanilla en sus dispositivos partiendo directamente de la página de Github de Sony, en lugar del proyecto propio de Google.
A tener en cuenta que no todos los componentes del terminal funcionarán, ya que el Xperia Z dispone de binarios propietarios para el módem y la cámara, que no pueden liberarse al público. Además, hay otros binarios liberados por Qualcomm y Xperia Z que no pueden formar parte de su AOSP al no ser de fuente de código abierto. Una de las ideas es el reemplazo de estos binarios por otros de código abierto.
Este movimiento hace de Sony un ejemplo a seguir por otras compañías.