Por el tono amable de su voz podríamos confundirla fácilmente con el amigo buena onda de Tiger. Pero su forma de hacer música nos hace pensar que todas las ciudades tienen su propia Juana Molina. No es que Juana haya inventado esa forma unitaria y atómica de hacer música sola en un escenario, pero de alguna manera la validó con un sello propio tan original como para inspirar a otros a hacerlo. Hoy desde Melbourne Australia este nombre simpático nos ayuda a bajar un cambio.
Pikelet es una de esas chicas que se valen por sí solas y no necesitan más que una maquinita que les repita todo lo que ellas quieren para pararse adelante de un variado grupo de gente que la mira desde sus anteojos de marco grueso. Tiene algo de actriz under como Bjork en su voz y también algo que recuerda vagamente a Laetitia Sadier, inolvidable voz de Stereolab. Pikelet tiene una forma de secuenciar la música tocando lo menos posible que la muestra indudablemente como un ser sensible y si a veces necesitamos darnos fuerte la cabeza contra una guitarra otras necesitamos que nos acunen un poco.