Ya estamos en otoño, aunque quién lo diría por las temperaturas que nos acompañan. Nooooo, no me estoy quejando, que a mi este calorcillo, el solecito y días como los del fin de semana pasado me encantan y me dan la vida.
Es verdad que el otoño es una estación preciosa: las hojas de los árboles se tiñen de preciosos colores, desde el verde hasta el ocre, pasando por una amplia gama de marrones, naranjas y rojos caldero, pero los días son más cortos, y se hace de noche enseguida. A pesar de todo, volvemos a nuestra cita mensual con el Reto "Alfabeto Dulce", estrenando nueva temporada tras las vacaciones de verano.
En esta ocasión, las encargadas de elegir ingredientes han sido nuestras compañeras Rocío de "Los dulces de Coco" y Mercedes del blog "Merce´s Cake" y verdaderamente los ingredientes han sido peculiares y la combinación de ambos de lo más original.
El primero de los ingredientes ha sido el poco conocido xilitol o azúcar de abedul, alternativa al uso de cualquier azúcar, sirope de ágave, miel o edulcorantes artificiales. Se obtiene de la corteza del abedul y tiene un 40% menos de calorías que el azúcar común y un índice glucémico bajo, por tanto es adecuada su utilización en dietas hipocalóricas y en diabéticos.
El xilitol se puede emplear en repostería ya que tanto su sabor como el dulzor que aporta a las recetas, es similar al del azúcar, además de ser estable a altas temperaturas. La proporción a añadir si queremos sustituir por azúcar de abedul, el azúcar en cualquiera de nuestras recetas, es la misma que si utilizásemos ésta.
El aguacate es el otro ingrediente elegido. Nunca antes lo había utilizado para preparar una receta dulce y me ha sorprendido gratamente su sabor. El aguacate nos aporta energía y a pesar de tener un alto contenido en grasa, ésta es una grasa saludable que ayuda a disminuir los niveles de colesterol, previene el envejecimiento de la piel, y ayudar a prevenir los infartos y enfermedades cardiovasculares entre otras.
Cuando mis compis de reto me dijeron los ingredientes que habían elegido, me quedé un poco descolocada. Al principio no se me ocurría ninguna receta que hacer, con el xilitol por desconocimiento y con los aguacates porque hasta entonces siempre los había utilizado para preparar guacamole, ensaladas, en definitiva, para recetas saladas.
En lo que he podido leer acerca de los aguacates en los postres, he visto que el chocolate combina perfectamente con ellos, al igual que con los calabacines. Esto último ya lo sabía, además ya había empleado esta verdura anteriormente para la preparación de este bundt cake glaseado con crema de cacahuete.
Así que me he animado y he utilizado aguacates y calabacín para hacer este bizcocho sin azúcar y luego lo he bañado con una cobertura de chocolate negro rico, rico. Os lo cuento a continuación.
INGREDIENTES
Para el bizcocho
- 300 gr. de calabacines rallados
- 75 gr. de pulpa de aguacate
- 350 gr. de harina
- 2 cucharaditas de levadura
- 75 ml. de aceite de girasol
- La ralladura de 2 limones
- 175 gr. de xilitol (se puede sustituir por azúcar)
- 3 huevos tamaño L (batidos)
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
Para el chocolate de cobertura
- 200 gr. de chocolate negro para postres
- 200 ml. de nata líquida para montar 35% M.G.
ELABORACIÓN
Calentamos el horno a 180º C y engrasamos un molde del tipo bundt cake con un poco de aceite. Yo he utilizado el molde "Vintage Star" de Nordic Ware.
Rallamos el calabacín y lo ponemos en un colador para que vaya escurriendo todo el líquido que suelte. Reservamos.
Tamizamos la harina con la levadura. Reservamos.
Trituramos el aguacate con el aceite en un procesador de alimentos hasta que quede una pasta suave.
En un recipiente ponemos el calabacín, la pasta de aguacate, la ralladura de lima, los huevos, el xilitol (o azúcar) y la vainilla y mezclamos bien. Agregamos la harina con la levadura y combinamos bien hasta que la masa esté homogénea.
Vertemos la masa en el molde y horneamos una hora aproximadamente o hasta que insertando un palito en el centro del bizcocho, éste salga limpio.
Dejamos 10 minutos en el molde que se enfríe un poco y transcurrido este tiempo pasamos el bizcocho a una rejilla para que se enfríe por completo.
Mientras preparamos la cobertura, para ello en un recipiente troceamos el chocolate. Calentamos la nata líquida en un cazo y cuando empieza a hervir la vertemos sobre el chocolate. La dejamos sin revolver durante 5 minutos y a continuación la mezclamos bien hasta que conseguimos una crema de chocolate homogénea.
Dejamos que se enfríe un poco y la vertemos sobre el bizcocho. Dejamos que caiga el chocolate sobrante sobre un plato. Cuando ha escurrido bien colocamos el bizcocho en una fuente o cake stand y el chocolate restante lo ponemos en una jarrita para acompañar el bizcocho.
Nota: Este molde es un poco grande para la cantidad de masa que obtenemos con esta receta, no se llena por completo el molde pero queda bien. También se puede utilizar un molde del tipo plum cake.
Ayer domingo, con la fruta de postre saqué también este bizcocho. Había mayoría de niños sentados a la mesa y sorprendentemente los que lo probaron quedaron encantados. Es verdad que no dije de qué era el bizcocho (a veces es mejor no saber los ingredientes). Estoy segura que si hubiera dicho que el bizcocho era de calabacín y aguacate la chiquillería hubiera empezado a poner caras raras.
Me ha sorprendido gratamente la esponjosidad de este bizcocho. Sin lugar a dudas la combinación de aguacate y calabacín aporta mucha humedad y hace que el bizcocho además de jugoso quede hueco y nada pesado.
Anteriormente había preparado bizcochos con calabacín pero os tengo que decir que mezclado con el aguacate el sabor es todavía más rico y especial. Os animo a que lo probéis. No os de miedo esta combinación, de verdad que os va a encantar.
Este mes el #retoalfabetodulce es un poco diferente, así que estoy ansiosa por ver todas vuestras recetas que como ya es costumbre, serán deliciosas, originales y un mes más, harán que entre todos creemos un completo recetario.