Después de la cantidad de fresas ingeridas por la temporada, me sumo ahora a la llegada de la cereza. Y si es del Valle del Jerte, mejor que mejor. Por descontado… me tira la tierra, pero es que sin lugar a dudas, inagualables en sabor y textura son las cerezas extremeñas, las picotas. Por eso cuando las veo, me tiro en plancha por ellas. No por nada más de un millón de cerezos pueblan todo el valle, cuya actividad en los tres meses de recolección, suponen el sustento de muchas familias. La imagen que se proyecta con la floración de los cerezos es una estampa difícil de olvidar. Si no has tenido oportunidad de verlo nunca, programa una visita para la próxima primavera. Un día para observar el gran manto blanco que arropa el Valle en lo que se denomina la fiesta del cerezo en flor.
La receta de hoy la puedes probar con cualquier otro fruto rojo… y es que me he dado cuenta de que soy amante de todos ellos: fresa, frambuesa, cereza, moras, arándanos, ciruelas pasas, granadas… un sinfín de variedades todas ellas ricas en antioxidantes. ¡Vamos allá!
Para las cerezas
- 150 g de cerezas (a ser posible del Jerte) deshuesadas
- 1 cuchara de mantequilla
- 25 ml de ron añejo
Deshuesar las cerezas es una tarea muy fácil, sobre todo si te ayudas de una pajita/cañita. Basta con que la pajita sea bastante gruesa o dura y así evitar que se rompa. Un truco que uso a veces, es meter una dentro de otra y así consigo que me de el grosor para la fuerza que se ejerce. Basta con ver el collage de fotos más abajo para ver lo sencillo que resulta librarte del hueso de una manera muy efectiva pues el hueso sale limpio y no se desperdicia ni la más mínima cantidad de fruta. Para hacer smoothies, las deshueso y las congelo.
Calienta en una sartén la mantequilla hasta derretirla. Añade las cerezas a fuego medio y remueve. Lo importante es que no se quemen. Añade el ron y deja que se suavicen sin llegar a perder la forma, tal y como ves en las fotos.
Para el bizcocho
(¡OJO! las cantidades son para un molde pequeño. Para molde grande, dobla todas las cantidades)
- 2 huevos
- 100 g de azúcar
- 1 cuchara de vainilla
- 150 g de harina
- 60 g de yogur
- 35 ml de aceite de girasol
- 1/2 sobre de levadura
- Ralladura de media naranja
Bate muy bien los huevos junto al azúcar. Añade el yogur y la vainilla y sigue batiendo. Por último, agrega el aceite de girasol hasta que se integren todos los ingredientes húmedos. A continuación, añade poco a poco la ralladura y la harina con la levadura (previamente tamizada) hasta que quede una mezcla densa.
Vuelca la masa sobre el molde, previamente engrasado para que no se pegue. Coloca las cerezas una a una y sobre las cerezas el almíbar sobrante. De este modo, conseguirás que las cerezas no se vayan al fondo.
Precalienta el horno a 200º durante 10 minutos. Hornea a 160º sobre 25 min o hasta que un palillo salga limpio.
Si no sabes de dónde sale el nombre bundt cake y te interesa, puedes leerlo aquí:
Bundt cake de leche hervida
Fuente: Recetasderechupete.com
Gracias por pasar a leer mi propuesta. Déjame un mensaje, me encanta saber que estuviste por aquí.