Los moldes más famosos, más chulis y más caros, carísimos, son los de la marca NordicWare, aunque hay muchísimas marcas y modelos, a cual más bonito.
Mi molde es de silicona, que no es por nada pero, mucho más fácil a la hora de desmoldar.
Decidí hacer este bundt un poco sobre la marcha, porque uno de mis mejores amigos me había invitado a cenar a su casa y no quería ir con las manos vacïas.
Ingredientes
- 225 gr. de mantequilla (pomada)
- 200 gr. de azúcar
- 320 gr. de harina
- 4 huevos tamaño L
- 2 yemas
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1/2 cucharadita de levadura
- 1/4 cucharadita bicarbonato
- 175 gr. de chocolate blanco
- 125 ml. de nata líquida
- 125 ml. de buttermilk (*)
- 200 gr. de frutos rojos congelados
(*) Para hacer la buttermilk ya sabéis que sólo tenemos que echar una cucharadita de limón en 125 ml. de leche y dejarlo 15 minutos sin remover.
Precalentamos el horno a 170º C y engrasamos un molde de bundt cake con mantequilla.
Hacemos un ganaché con el chocolate blanco y la nata, calentando ésta hasta que haga burbujitas y luego echando el chocolate y revolviendo hasta que se deshaga por completo. Reservamos.
Tamizamos la harina con la levadura y el bicarbonato y reservamos.
Batimos la mantequilla con el azúcar hasta que blanquee y obtengamos una crema suave. Añadimos las yemas y los huevos uno a uno y mezclamos bien. Agregamos el extracto de vainilla y mezclamos.
Comenzamos a añadir la harina alternativamente con la buttermilk y mezclamos bien hasta obtener una masa homogénea. A continuación agregamos el ganaché de chocolate y mezclamos bien con la ayuda de una espátula.
Por último agregamos los frutos rojos congelados con movimientos envolventes hasta que estén bien integrados.
Volcamos la mezcla en el molde y dejamos que se vaya extendiendo. Luego golpeamos el molde suavemente contra la mesa para así elimiar cualquier burbuja de aire. Horneamos durante 70-80 minutos dependiendo del horno, o hasta que si lo pinchamos el palito salga limpio.
Cuando lo sacamos del horno lo dejamos enfriar 10 minutos antes de desmoldarlo.
Perfecto para el postre y ¡¡¡todo un exitazo!!!. Con deciros que el domingo se iba de viaje y se lo llevó en la maleta para desayunar....
Amistad + bundt cake = perfecta combinación.
Ana