Cada región tiene su dulce tradicional, si vamos a la zona norte podemos encontrar uno de mis preferidos la quesada pasiega, en Madrid son muy típicos los buñuelos de viento (estos también tradicionales en la fecha de todos los santos), una clásicas filloas gallegas o unas flores de carnaval extremeñas, entre otras muchas recetas de postres tradicionales.
Respecto a las recetas de dulces tradicionales, sé que seguramente en cada casa se haga de una manera. Esta es la receta de buñuelos que yo siempre he realizado y que os garantizo que salen unos buñuelos esponjosos y dulces.
Un consejo que quiero daros es que yo cuando empecé a hacer buñuelos pensé que tenía que tener una masa muy espesa, eso no es así. Al freír esa masa, los buñuelos se van formando en bolsa en el aceite, es muy chulo de ver.
Con este pequeño consejo no dudes en ponerte a hacer estos buñuelos de calabaza tan sencillos y rápidos en estas fechas de todos los santos. Aunque yo recomiendo siempre hacerlos de vez en cuando porque están buenísimos.
Ingredientes para hacer buñuelos de calabaza
- 250 gramos de calabaza
- 160 gramos de harina de trigo
- 40 gramos de azúcar moreno o azúcar blanca
- 1 huevo
- 15 g de levadura química (1 sobre)
- aceite de girasol para freír
- azúcar y canela para rebozar los buñuelos
- 1 pizca de sal
Cómo hacer la receta tradicional de buñuelos de calabaza
1.- Comenzaremos con la cocción de la calabaza. Pelamos la calabaza y quitamos las pepitas. La cocemos en agua durante unos 25 minutos hasta que esté muy blanda y podamos hacer un puré de calabaza.
2.- Una vez cocida la calabaza, trituramos junto con las ralladura de naranja y la de limón y dejamos enfriar un poco.
3.- El siguiente paso es agregar el azúcar. Seguimos triturando. Si deseamos hacer esto a mano no hay problema, yo la verdad que siempre que lo he hecho he usado la batidora.
4.- Ahora es momento de agregar la harina y la levadura tamizadas. Lo de tamizar la harina es por si lo hacemos a mano, si usamos la batidora de mano no creo que haya problemas en encontrarnos grumos.
5.- Continuamos con la canela y el huevo. Seguimos batiendo hasta obtener una masa espesa. Dejamos reposar unos minutos.
6.- Calentamos abundante aceite de girasol en una sartén. Para los postres es mejor usar de girasol en vez de aceite de oliva y es porque este mantiene mejor las altas temperaturas y además no le aporta nada de sabor.
7.- Con el aceite caliente, nos disponemos a freír los buñuelos. Dejamos caer una pequeña cantidad de masa en el aceite. No os preocupéis porque ellos solos forman los buñuelos y en la mayoría de ocasiones se giran solos.
8.- Una vez dorados, pasamos a un papel absorbente y seguidamente rebozamos en azúcar y canela.