Menú íntegramente madrileño esta noche en el botánico: los veteranos Los Enemigos y los veteranísimos Burning. Identidad madrileña en vena . Un plantel cuyo lenguaje exuda las aventuras de las calles de la capital y muestran la chulería de un rock and roll creado en otras circunstancias, cuando el volumen era considerado peligroso y antes de sus conciertos no cenabas un brioche de rabo de todo, sino una caña con tapa de chorizo o un bocata calamares.
Josele Santiago y sus secuaces aparecieron en escena con el mismo vestuario que en La Riviera hace unos meses y les bastó mentar a John Wayne para que la amplia representación de camisetas de la banda recitase de memoria todos sus versos. El repertorio constó de grandes éxitos sin pausa: Septiembre, Señora, Brindis o la "canción carcelaria" Desde el jergón. Siempre cumplidores y profesionales, el cuarteto se deshace de sus chupas y despacha su setlist sin cuartel.
El bajista Fino Oyonarte se ocupó de las voces en Océano y No se lo cuentes, donde alabó el disfrute de la audiencia: "nos merecemos estos momentos después de estos dos añitos". El mismo Fino presentó La Otra Orilla como una canción "para recordar a la gente que se nos ha ido en este tiempo".
Una pequeña visita al pub rock de Complejo sirvió para que Josele apostillara: "me río yo de los sirex". Tras una última Cuenta Atrás y un pequeño bis para enaltecer la amistad llegó el descanso, unos minutos de asueto para seguir compartiendo listas de conciertos como muescas en la culata.
Ya con la oscuridad de la noche como compañera salió la formación actual de Burning con nueve músicos sobre las tablas. La cosa no pudo comenzar peor. Varios acoples provocan que paren de tocar y tengan que empezar de nuevo. Chungo tema, pero Johnny Cifuentes no se china: "Así es la vida chicos, a veces no puedes conseguir lo que deseas". Y el mítico teclista y cantante ya pone a los Stones sobre la mesa.
Abren la velada con Sé cómo vivir (no cómo vivir) del disco Hagámoslo de 2021, firmado como Johnny Burning. El ambiente se fue caldeando con No pares de gritar o su nuevo single Algo está ardiendo "Something is burning", pero tuvo que llegar Jim Dinamita para que la basca explotara coreando todas las letras. El teclista corre de un lado para otro saludando como la estrella del rock que es y aprovecha para sentenciar: "conozco prácticamente a toda la gente que ha venido".
Prosigue el concierto, mucho más caótico que el anterior pero con bastante más energía, y cae Como un huracán, con un magnífico solo slide y un gran acompañamiento de saxo a la genuina voz del frontman, que no pierde la oportunidad de fardar de saxofonista "Maikol lleva con nosotros desde siempre".
"Esto es rock and roll auténtico de aquí, de la meseta. No tengo nada en contra de los de allí... pero yo soy de aquí, del foro" Cifuentes chana de historia del rock, él es parte y lo demuestra afrontando ¿Qué hace una chica como tú en un sitio como este? con la chulería que requiere. Desde la pista el público se cosca de que se acerca el final, nadie se amuerma y se cantan Esto es un atraco, Es especial y Mueve tus caderas, trío tope guapo antes del epílogo con Una noche sin ti, una guinda al pastel que pese a ser un medio tiempo no corta el rollo y hace que todos nos vayamos a queli con una sonrisa.