Buscando guardería para mi bebé

Por Clara Ingeniera @mamaingeniera

Cuando nació Bichito, veía muy lejano el momento de elegir guardería. Aunque el hecho de que naciese en diciembre me pareció una ventaja para que en septiembre empezase la guardería con 8 meses, la verdad. Aún así, barajamos la posibilidad de “Madres de día” y suegros, pero acabamos descartándolo.

Teníamos decidido que intentaríamos que le admitiesen en una guardería (o escola bressol, como se llama en Cataluña) pública, pero ahora no lo tenemos tan claro.

Tenemos amigos que, a la hora de inscribir a su hija en una guardería pública, se quedaron sin plaza, por lo que la niña tuvo que ir a una privada. A raíz de esto, y de otros casos, vimos lógico “reservar” plaza en una guardería privada a pesar de hacer la inscripción en una pública (algo para lo que falta menos de un mes).

Teníamos 3 o 4 opciones de guardería en nuestro barrio, pero solo hicimos visita a una y nos encantó. Además, conocemos a gente que ha llevado ahí a sus hijos y nos dio muy buenas referencias, y su precio, casi el mismo que una guardería pública pero con la flexibilidad de una privada.

No sé, sentimos muy buen feeling y creo que es lo único que se necesita a la hora de dejar a tu hijo a cargo de alguien. Que te inspire confianza, que te guste el ambiente.

Pensamos en visitar también otra guardería con buena fama, pero con precios de 600€/mes hacia arriba y dijimos “pa qué? si ya nos ha gustado la otra… además, no conocemos a nadie que haya llevado ahí a sus hijos”.

Dicho y hecho.

La semana pasada fui a reservar plaza para Bichito y salí casi llorando de allí.

Por un lado estaba feliz de ver que había encontrado un sitio que me gustaba tanto tantísimo, pero por otro lado, el simple hecho de pensar que me tenía que separar de mi bebé, me partió el corazón. Incluso ahora que estoy escribiendo esto, me emociono.

Aunque iremos a ver las guarderías públicas que hay cerca el día que hagan “puertas abiertas”, nos estamos planteando llevarlo a la privada. El precio es buenísimo y probablemente tenga alguna que otra ventaja que confirmaremos cuando vayamos a la jornada de puertas abiertas de las públicas.

Y no dejo de imaginarme ese “primer día” de guardería de Bichito. ¿Llorará? ¿Cogerá muchos virus? ¿Habrá el típico niño que le arañará la cara o será él el bully?

¿Cómo fue la búsqueda de guardería de vuestros bebés? ¿A partir de qué edad los llevasteis? ¿Qué creéis que es importante a la hora de elegir guardería? Todas vuestras experiencias que creáis que me puedan ayudar, bienvenidas son.