Si preguntase de dónde han salido las siguientes expresiones uno puede pensar que se trata de la interceptación de alguna comunicación en una iduscutible zona bélica.
Bueno, sí y no. El lugar de donde emanan no está considerado como 'zona de guerra' aunque haya muchos allí atrincherados y tirando a matar. Estas curiosas perlas tienen como costumbre sortarlas los buenos de Carlos Dávila y Alfonso Rojo en 'El gato al agua'. Y, concretamente, en el último programa les acompañó en los coros Alejo Vidal-Quadras.
No soy capaz de dar una sola respuesta a por qué utilizan este lenguaje belicista. Son sólo ideas. Es decir, yo pienso de una manera, tú de otra, y las expones, sin más. Tú crees que hay que bajar impuestos, yo subirlos, o al revés, pero no creo que haya que expresarse en esos términos (por desgracia tan conocidos en este país) para defender unos argumentos.
Lo único que se me ocurre tiene que ver con las audiencias. Parece ser que sólo existe un modo de fidelizar, y es la creación de "bandos" (también lenguaje castrense" para que cada individuo se identifique y más tarde fidelice al consumo de tu producto.
¿El fin último?, al margen de la guerra por los públicos, creo que hay algunos que siguen empeñados en la búsqueda de esa absurda idea de las 'dos Españas'.