Se trata de una mascarilla blanca, con una textura de crema pero mucho más densa. Tiene olor a naranja, se extiende bien y se siente fresquita en la piel.
Tiene una combinación rica en activos que contribuyen a mejorar el tono de la piel, consiguiendo un aspecto más claro, luminoso y uniforme. La Vitamina C junto con el Complejo Clarificante interfieren en la síntesis de melanina, evitando y aclarando pigmentaciones no deseadas. El Matrixyl y la Vitamina C favorecen la síntesis de colágeno, disminuyendo arrugas e incrementando la firmeza, tersura y elasticidad de la piel. El extracto de Naranja Dulce realiza una exfoliación suave y los pigmentos naranja aportan brillo y reflejos a la piel.
¿Cómo se usa? Debemos limpiar y tonificar nuestra piel previamente. A continuación se aplica de manera uniforme sobre todo el rostro, evitando el contorno de los ojos, la cantidad suficiente de mascarilla, al menos 1 mm de espesor. Dejar actuar durante 10-15 minutos y retirar con abundante agua fría, para tensar más la piel. Tras retirarla para potenciar su efecto podemos aplicar una crema con Vitamina-C, una ampolla flash o bien nuestra hidratante habitual.
Textura de la mascarilla: es como una crema pero mucha más espesa
Mi Opinión: he quedado maravillada con esta mascarilla. La aplico cuando noto mi piel apagada o cuando quiero lucir perfecta. Es fácil y cómoda de aplicar, y el resultado es todavía mejor. Os la recomiendo para los días que tengáis alguna celebración y queráis que os digan lo guapas que estáis. Realmente aporta mucha luminosidad y vitalidad a la piel, un tono sonrosado y un aspecto radiante y saludable. ¡Os sorprenderá!
Es apta para todo tipo de pieles, aunque las pieles apagadas o estresadas la agradecerán. Mejora la textura y la elasticidad de la piel, hidratándola en profundidad y contribuyendo a minimizar arrugas y líneas de expresión.
Contiene 30 mL y cuesta alrededor de 20€. Podéis encontrarla en farmacias y parafarmacias.
¿Habéis probado esta mascarilla? ¿Os ha gustado?