Y es que el pasado martes Ana Pastor era elegida Presidenta de la Cámara Baja, con el apoyo de los diputados del PP, de Ciudadanos y de diez más que, supuestamente, se desconoce su procedencia; aunque todo parece indicar que vienen de PNV y de Convergencia (o como se llamen). Y por esos diez votos se ha montado el lío, porque a los naranjitos les ha sentado fatal que esos votos puedan significar un acuerdo secreto para la investidura de Rajoy. A cambio, según dicen, el PP ha sentado al PNV en la Mesa del Senado y podrían permitir que los convergentes tengan grupo propio en el Congreso, algo que conforme a Ley no les correspondería. Y a mí eso de que el PP le “regale” el grupo a estos separatistas no me parece bien, ya que en mi opinión no se debería ayudar de esta manera a una formación política cuyo objetivo es romper España. Aunque si no lo hace el PP seguramente lo haga el PSOE… Y es que la Ley está para cumplirla y eso de buscar soluciones “imaginativas” no debería permitirse. Pero parafraseando a Pablo Iglesias en política se ha de aprender a cabalgar contradicciones y a lo mejor, dándole ese grupo a los ex convergentes, se consigue algo positivo y beneficioso, como es que el Partido Popular continúe gobernando España y aplicando las políticas que necesitamos. Y si esto le sienta mal a Ciudadanos, que por cierto, también se ha beneficiado de esos diez votos sin nombre, lo tiene muy fácil, que cambie su abstención por un voto favorable y que presione al PSOE para que deje de poner palos en las ruedas y se ponga a trabajar por España. ¿No querían una nueva etapa en la política?, ¿no querían más negociación y menos rodillo? Pues parece que eso es lo que está haciendo ahora el PP, no entiendo entonces porque lo critican tanto...
Y es que el pasado martes Ana Pastor era elegida Presidenta de la Cámara Baja, con el apoyo de los diputados del PP, de Ciudadanos y de diez más que, supuestamente, se desconoce su procedencia; aunque todo parece indicar que vienen de PNV y de Convergencia (o como se llamen). Y por esos diez votos se ha montado el lío, porque a los naranjitos les ha sentado fatal que esos votos puedan significar un acuerdo secreto para la investidura de Rajoy. A cambio, según dicen, el PP ha sentado al PNV en la Mesa del Senado y podrían permitir que los convergentes tengan grupo propio en el Congreso, algo que conforme a Ley no les correspondería. Y a mí eso de que el PP le “regale” el grupo a estos separatistas no me parece bien, ya que en mi opinión no se debería ayudar de esta manera a una formación política cuyo objetivo es romper España. Aunque si no lo hace el PP seguramente lo haga el PSOE… Y es que la Ley está para cumplirla y eso de buscar soluciones “imaginativas” no debería permitirse. Pero parafraseando a Pablo Iglesias en política se ha de aprender a cabalgar contradicciones y a lo mejor, dándole ese grupo a los ex convergentes, se consigue algo positivo y beneficioso, como es que el Partido Popular continúe gobernando España y aplicando las políticas que necesitamos. Y si esto le sienta mal a Ciudadanos, que por cierto, también se ha beneficiado de esos diez votos sin nombre, lo tiene muy fácil, que cambie su abstención por un voto favorable y que presione al PSOE para que deje de poner palos en las ruedas y se ponga a trabajar por España. ¿No querían una nueva etapa en la política?, ¿no querían más negociación y menos rodillo? Pues parece que eso es lo que está haciendo ahora el PP, no entiendo entonces porque lo critican tanto...