Sinópsis: Cuando, al estallar la primera guerra mundial, el padre de Albert vende el caballo del muchacho, Joey, al ejército británico, el chico promete ir al frente y recuperarlo. En medio de la batalla, el ruido ensordecedor de los disparos, los compañeros que perecen en el camino y las penurias de los que sobreviven, Joey se preguntará si esa guerra atroz e inclemente finalizará alguna vez. Y si es así, ¿se reencontrará con Albert?Al iniciar con la lactura, la primer sorpresa con la que me encontré apareció desde la primera oración: quien narra la historia no es nadie más ni madie menos que el mismísimo caballo, Joey. Es algo que no me esperaba y que después de unas cuantas páginas terminó agradándome que fuera así. Otra cosa que me sorprendió es su extensión, de 176 páginas, y siendo la cinta de una duración de más de dos horas, pensé que en ella se habrían inventado mucho, pero sorprendentemente no es así. En general, la película es muy fiel al libro y los cambios son menores; entre éstos se encuentra la supresión de un par de personajes (que en realidad son cambiados por otros) y de algunas partes que de haber estado presentes solo hubieran afectado el ritmo del film (y me hubieran hecho sufrir más).
Un aspecto que es importante destacar es el valor propio que posee la adaptación. Y es que la película ofrece una perspectiva mucho más amplia, pues no está contada, como la novela, desde la subjetividad del caballo. Éste sigue siendo el protagonista y parte esencial de la trama, pero seguimos su camino desde la perspectiva humana. Eso es algo que se agradece, pues al final, libro y película se complementan perfectamente. Así, habiendo leído la obra, al ver la película es imposible no pensar en lo que está pasando por la mente de Joey en cada momento.
Pero el cambio de perspectiva en nada afecta la escencia de la historia, pues ambas fuentes hablan, entre otras cosas, del lado absurdo de la guerra; de como ésta quita todo a todos y no deja más que destrucción, de como los soldados se encuentran inmersos en un entusiasmo resultante de la ignorancia, pues pelean sin saber la razón; de la valentía que nace del temor y viceversa, etc. Y la manera en la que se representa todo esto en el clímax es fantástica, probablemente es mi parte favorita tanto en el film como en la novela.