Para el que recién entra a este espacio cabezón y no conozca a estos músicos mexicanos, les comento que Cabezas de Cera es un raro tipo de "power trío" donde cada miembro domina una paleta enorme de sonidos electrónicos y acústicos, sin contar a los vientos y bronces, el adicional del sonido eléctrico, y los propios instrumentos que crean los músicos -así como también otros ritmos e instrumentos: stick, bajo, guitarras, sintetizadores batería, tambores, múltiples elementos de percusión, saxo, clarinete, flauta, sampleos y sonidos de viento controlado por sintetizador y voz- que les permite explorar infinidad de posibilidades musicales basadas en la música contemporánea pero con mucha pero mucha fusión de múltiples géneros, con arreglos intrincados, polirritmias, una ligera mezclada con melodías tradicionales mexicanas, todo ello para cubrir todos los aspectos de su música.
Artista: Cabezas de CeraÁlbum: ...Un segundo
Año: 2002
Género: R.I.O. / Experimental / Progresivo ecléctico
Duración: 47:14
Nacionalidad: Mexico
Otro grupo del cual ya hemos presentado álbums y hablado mucho de ellos, es que deben ser una de las propuestas más interesantes que existieron en este lado del mapa.
Este es el segundo disco de este extraordinario y alucinante trío mexicano formado por los multi-instrumentistas Mauricio Sotelo, Francisco Sotelo y Ramses Luna, quienes vienen a confirmar su calidad estética con su propuesta única, en donde se fusionan a la perfección los mundos del jazz, el rock, al avant-garde, el word beat y la música popular mexicana en una mezcla más que interesante entre los instrumentos acústicos, eléctricos y otros inventados por ellos mismos. "... Un Segundo", sucesor de su disco homónimo del 2001, es una notable muestra de cómo una banda puede mantener su identidad sin prejuicio a que tome elementos de las diversas corrientes que nombramos más arriba. Es así, como en una especie de recorrido fragmentado por los sonidos citadinos de México, CDC va creando sus notables composiciones en un disco lleno de las más diversas sonoridades y colores musicales. Lo interesante es que desde un sonido noisy y de búsqueda sónica pasamos sin ningún problema a algo más folklórico o cercano al jazz fusión.Héctor Aravena A.
Es así como nos topamos con canciones realmente notables por su ejecución y composición tales como 'Cósmica', llena de vientos alienados, stick, solos de guitarras y diversas percusiones; 'In Statu', en la que resaltan los notables solos de flauta, unidos a sonidos más electrónicos y al poder rockero de las sólidas bases de percusión y stick, entre otras decenas de detalles sonoros que van tejiendo la trama de la canción; 'En El Camino', en donde por primera vez se muestra en todo su esplendor el lado más acústico de CDC; 'Elementos', quizás la más folklórica, con cánticos que nos recuerdan a las míticas y olvidadas leyendas del mundo precolombino, además de increíbles quiebres instrumentales; 'Escapista', en la que se cruzan el mundo de un rock potentísimo, el jazz y la experimentación sonora; 'Balum Canan', otro tesoro; para ir cerrando el ya notable disco con dos composiciones que siguen resaltando la cualidades indiscutibles de CDC: 'Mil Noches' y el cierre acústico de 'Retorno'.
Realmente una de las bandas de mayor proyección que he escuchado en el último tiempo, con una propuesta única en su especie y con instrumentistas que están a un nivel que sorprende a cada instante. No me queda más que recomendar a ojos cerrados este disco, que aunque en un principio cuesta un poco interiorizarlo por los sonidos y conversaciones extraídos de la ciudad, finalmente, tras darle unas vueltas, nos percatamos de la tremenda banda que tenemos en frente. Una verdadera joya del rock hispanoamericano de nuestros días, que promete un futuro esplendor para la música que realmente aporta contenidos y riesgo musical.
Lo experimental se robustece en proporción geométrica hasta llegar a una nueva dimensión en el segundo disco de CABEZAS DE CERA, "…un Segundo". Este trabajo ostenta un sonido más agresivo que el debut homónimo, en líneas generales, así como un sentido de la aventura más pronunciado. En no poca medida, el uso más recurrente de sonoridades de raíz tecnológica ayuda a este trío a expandir de manera osada y eficaz las potencialidades de su ininterrumpido ingenio musical. Pero, a su vez, esta expansión sonora aparece sólidamente encuadrada en una actitud estilística más cohesiva en comparación con la línea más heterogénea trabajada en el disco debut, siendo el dinamismo controlado del KING CRIMSON ochentero y las vibraciones peculiares de la fusión los elementos más recurrentes, sin por ello menospreciar la presencia de musique concrete, ambientaciones psicodélicas etéreas y jazz-rock.César Mendoza
El repertorio de "…un Segundo" está armado en una secuencia continua, lo cual ayuda a crear una sensación de viaje en la imaginación del oyente empático. Los ruidos de transporte urbano y cláxones, el paso de indefinidas caminatas y conversaciones casuales, todo eso crea una ambientación de estar ante un paseo simbólico por los diversos rincones de la gran urbe. ‘Intro’ y ‘Cósmica’ se integran bien dentro de la lógica de la confluencia entre la vanguardia y las vibraciones intemporales de lo étnico, siendo así que ‘Intro’ comienza con un despliegue de caos que termina aterrizando en una secuencia alucinada de base funky, mientras que ‘Cósmica’ guarda una estructura más firme y más marchosa, basada en una frenética relectura trance de la ideología crimsoniana. ‘In statu’ continúa con este híbrido ágil de vanguardia y etnia, aunque esta vez el candor es el tono predominante: los diálogos entre la flauta midi y la percusión tonal electrónica, completados por el stick, exudan una calidez envolvente, exceptuando esos pasajes en los que la sonoridad se pone un poco más ácida.
‘En camino’ enarbola un espíritu bucólico marcado por los colores exóticos creados por la guitarra acústica, los mismos que dirigen el desarrollo de la pieza. Por su parte, los vientos de LUNA se desenvuelven en impresionantes solos que realzan las alusiones arábigas de la pieza. ‘Elementos’ sigue por una onda muy semejante a la de la pieza precedente, aunque esta vez la sonoridad esencial incluye acentos indígenas intercalados con exotismos más lejanos. ‘Escapista’ desarrolla una aureola de corte jazz-rock encapsulada entre las flotantes cortinas cibernéticas de fondo y ciertos pasajes donde sale a relucir un filo rockero altamente neurótico. El aire de extravagancia iniciado con esta pieza se redondea completamente con ‘Balun canan’, un tema que comienza con sonidos minimalistas tenebrosos para luego aterrizar en un motivo crimsoniano jazzeado. ‘Mil noches’ y ‘Retorno’ suponen sendos regresos frontales a la faceta étnica. La magia arábiga del primero se despliega de una manera bizarra, incorporando adornos misteriosos y creando algunos episodios climáticos impresionantes, mientras que el segundo es mucho más cándido, basado en aires latinoamericanos de carácter alegre.
Con "…un Segundo", el ensamble CABEZAS DE CERA vuelve a dar una lección de cómo crear música aventurera y llamativa a la vez, atractiva bajo sus propias reglas, sin condescendencia alguna a los esquemas estandarizados del mainstream. Y por supuesto, en lo referente al circuito progresivo, es una joya que deberá engalanar cualquier colección que se precie de ser, por lo mínimo, buena.
Nos confesamos devotos seguidores del rock clásico, preciosista, de tiempos marcados y bellas melodías. Pero reconocemos que eso es cómodo y fácil. Por eso a veces el cuerpo pide más. Gusta de complicarse la vida y de buscar cosas que le hagan sentir incómodo, que le obliguen a estirar los músculos, a intentar tocar la punta del pie con los dedos de la mano sin doblar las rodillas.Francisco José López Palomo
Pues sabed que para eso no hay cosa mejor que escuchar a esta peculiar formación mejicana, CABEZAS DE CERA, cuya seña de identidad consiste en ir de un punto a otro sin seguir la línea recta. Su propia historia da medida de lo sinuoso de sus vericuetos. En 6 años de trayectoria, el trío que son ahora ha llegado a ser hasta octeto. La formación la componen Ramsés Luna, al saxo, flauta, clarinete, didgeridoo o lo que se os ocurra que se pueda soplar, Mauricio Sotelo, que domina las cuerdas -la guitarra y el stick suenan de maravilla- y Francisco Sotelo, cuyo fuerte es la percusión.
Su primer trabajo editado, llamado como ellos, ha pasado a no ser el último, relegado por este que presentamos, que, curiosamente, se llama "... un segundo", habilidoso juego de palabras que seguramente haga referencia a que es su segundo trabajo, pero también a que este fascinante paseo por el borde del abismo se te pasa en ese tiempo, en un segundo. Su música es complicada, nada complaciente. Inclasificable e indefinida -progresiva por definición- se mueve por estilos muy contrapuestos que ahora intentaremos ir descubriendo. De todas formas, si queréis entender mejor qué es CDC, os recomendamos que leáis la presentación que aparece en su página oficial (sólo tenéis que pinchar en la portada del disco). Después de eso, si os atrevéis, escuchad cualquiera de sus dos discos.
Unos interludios hablados de apariencia espontánea, que comienzan en una figurada parada de autobús, nos sirven de nexo de unión entre los temas, asemejando la escucha a un viaje incierto y sorpresivo. Y es que en realidad es una sorpresa continua. Hay temas desquiciantes a veces, evocadores otras, incluso rayantes y enfermizos, pero siempre hechizantes. No puedes parar de oír. Necesitas saber qué va a ser lo siguiente.
En temas como "Cósmica" los conceptos progresivos se fusionan con fondos dance y electrónicos. Y avanzando en el paseo imaginario vemos como también conviven felizmente el electrizante ejercicio rítmico de "In Statu" con la obsesiva improvisación de Elementos o Escapista o con los aires moriscos de "Mil noches". Y para terminar de descolocarte, la última estación está decorada de música tradicional mejicana en "Retorno", un bálsamo final, como el masaje relajante tras el traqueteo del viaje.
En definitiva un trabajo inclasificable, lleno de contrastes, sorprendente, y desde luego muy recomendable, que produce inquietud y desazón. Sin duda está hecho para provocar. Un excelente disco de experimentación con gusto que no debemos pasar por alto y que nos muestra una vez más la buena salud creativa del continente hermano.
Éste grupo mexicano se propone los sonidos y la fragmentación del tiempo urbano desde su propuesta musical, sensible y álgida, única por estos propósitos sin dejar de todo el folclor, no lo aluden ni lo mezclan sólo lo proponen, lo sugieren con la melodía en la fuga.Joel Gustavo Rodríguez
En está grabación la fuga imaginativa de los sonidos proponen el día y el tiempo en la ciudad dando angustia, alegría y una de las cosas que más en lo personal he disfrutado: El juego, ya que las melodías se dan su espacio su pausa se presentan las melodías imaginativas como en diálogos de cada instrumento entre la dirección de cada una, la melodía nos lleva por el metro por la búsqueda de un tiempo perdido y el encuentro de gente y cosas y sensaciones, entre las prisas está es la verdadera moraleja de este trabajo conceptual, libre y altamente artístico, me parece que coquetea con el surrealismo más allá de las pretensiones de los mismos integrantes de Cabeza de Cera, y en muchos sentidos logran confabularnos de una música que bien es ecléctica y visceral pulsante y ávida en armonías, sin ser una música sosa y comercial, es dinámica y lo mejor que es totalmente plástica espontánea y convulsiva en un mundo de porques insulsos. Cabezas de Cera son artesanos generosos en esta grabación de 5 estrellas.
Sobresalen In Statu, En Camino y sobretodo Mil noches.
¿Y qué más podría agregar para orientar al recién llegado a estas músicas? Que baje el disco, porque yo no le puedo agregar nada más. Ah! lo único que me queda por decirles es que si alguien consigue "En Directo, Ciudad de México" del año 2004, estoy muy interesando en él así que por favor lo comparta (en lossless, como corresponde). Lista de Temas:
1. Parabus
2. Intro
3. Puente
4. Cosmica
5. Velocidad Maxima
6. In Statu
7. Tranvia
8. En Camino
9. Elementos
10. Camino Sinsouso
11. Escapista
12. Balun Canan
13. Linea Continua
14. Mil Noches
15. Retorno
Alineación:
- Mauricio Sotelo / grand stick, electric, & acoustic guitars, violin
- Francisco Sotelo / drums & various percussion
- Ramses Luna / various brass & woodwind instruments, MIDI-keys, voice
- Edgar Arrelin / engineering, devices