La
concesión de ayudas públicas por parte de entes autonómicos y locales para que
ciertas compañías aéreas creen rutas que pasen por sus aeropuertos es una
práctica común en España con la intención de aumentar el tráfico aéreo en sus
territorios.
La
Comisión Nacional de la Competencia (CNC) ha publicado su tercer informe anual
sobre las estas ayudas. Castilla y León es la región que
más recursos ha dedicado a este cometido en el período estudiado, 2007-2011, un
total de 84,28 millones de euros, seguida de Aragón con 34 millones.
El aeropuerto de Burgos es quién soporta el
coste más alto por cada pasajero transportado, 226 euros de media, el coste más
alto de todos. Contrasta con los 1,14 euros de Asturias o los dos céntimos de
Madrid. Medido en términos absolutos la inversión más cuantiosa de todas las
realizadas fue la destinada al aeropuerto de Zaragoza.
Esta
práctica constituye una forma de intervención en la economía que, como dice la
CNC “sin perjuicio de la persecución de ciertos objetivos de interés público,
puede alterar el funcionamiento de los mercados, introduciendo distorsiones al
juego competitivo y a la eficiencia de los mismos”.
En
relación a los fondos públicos recibidos por cada aerolínea, destaca, por
encima de todas, Air Nostrum que fue la principal receptora con casi 100
millones, seguida de Ryanair con la mitad. Medido en términos de pasajeros, la
filial de Iberia también se lleva la palma, tres euros por cada cliente
transportado, a mucha distancia del segundo Ryanair que cobró 0,6 euros por
pasajero.
La desaparecida Lagun Air y Vueling ocupan el
tercer y cuarto puesto de este dudoso ranking. En total las aerolíneas recibieron
casi 250 millones por esta práctica en el período estudiado.
El
informe no tiene en cuenta aquellos recursos destinados a fortalecer el capital
de algunas compañías como sería el caso de Spanair.
Y es
que la crisis no ha hecho menguar estas subvenciones encubiertas. A pesar que
desde 2008 las finanzas públicas renquean el nivel de ayudas sigue igual. Si en
2007 se destinaron casi 30 millones, en 2011 fueron 51 los millones destinados
a este fin.