El mítico Café Saigon ha sufrido una renovación en su imagen y no ha tenido más remedio que ajustar sus precios para poder mantenerse entre los restaurantes asiáticos más atractivos de Madrid. Café Saigon se estructura en dos plantas y este hecho le permite presentar dos ambientes claramente diferenciados. En su planta inferior se respira un ambiente moderno con la intrusión de elementos más clásicos, una gama cromática con tonos grises dorados y malvas y una amplitud de espacios que crea un espacio íntimo y acogedor. Esta planta presenta espacio de barra y una zona con mesas y sillas altas en las que disfrutar con su carta de picoteo oriental de manera más informal.En la planta superior mantienen su seña de identidad con una decoración colonialista que se prolonga hasta sus baños.
El éxito de Café Saigon se sustenta en una cocina con platos provenientes del sudeste asiático, en la que predominan los de origen vietnamita. La carta muestra un amplio repertorio de propuestas que se encuentra dividido en: sopa de tallarines phô y la mien, ensaladas y rollos, raviolis y dumplings, rollito frío vietnamita (Goi Cuon), pescados y mariscos, arroz, tallarines y verduras, y por último, los postres. Carta extensa, como suelen ocurrir en la mayoría de restaurantes de cocina asiática, en la que lo mejor es dejarte recomendar para de esta manera saborear los platos más suculentos.
También existe la interesante opción de explorar la cocina indochina a través de su menú degustación. Un menú consistente en 8 platos y 1 postre al precio de 28€/persona.
Otra opción para descubrir la cocina de Café Saigon es hacerlo mediante su menú ejecutivo que sirven de lunes a viernes al mediodía. Este menú se compone de un rollito a elegir, un surtido de dimsum, un plato principal, un postre y una bebida por 19,5€.
Empezamos a descubrir la cocina vietnamita con unos rollitos imperiales Café Saigon (5.50€). Estos rollitos tienen la peculiaridad de comerse enrollados en una hoja de lechuga y van acompañados con rodajas de pepino, menta y salsa de pescado. Un bocado fresco dónde encontramos un agradable contraste de texturas y un cilindro crujiente con un interior falto de alma.
Tras un irregular comienzo necesitábamos alegrarnos el paladar y lo conseguimos sobradamente con unos exquisitos dumplings de pato con boletus y foie a la pimienta de Szcheuan (4 unidades por 12€). Una combinación atractiva sobre el papel y, aún más, en boca. He de reconocerlo, hubo guerra de palillos chinos. Uno de esos platillos que debían servir en docenas, por lo menos.
Proseguimos con un pato crujiente al estilo Pekín servido con sus crepes, verduras y salsa hoisin (18€). La pieza de pato fue desmenuzada en directo por el simpático camarero que nos atendió durante la comida, aunque a diferencia de como ocurre en otros restaurantes, los rollitos te los debes elaborar tu mismo. Este hecho me pareció acertado, ya que de esta manera introduces sobre las finas láminas de crepe las proporciones de ingredientes a tu gusto. Debemos resaltar la calidad del pato empleado, a lo que se une una cuidadosa elaboración que concibe un exterior extremadamente crujiente y un interior tierno a la par que sabroso.
Una gran recomendación del camarero fueron los tallarines al estilo Thai (14€). Pasta fresca en forma de tallarín dónde percibimos un toque a mantequilla que les otorga mucho sabor y te permite comerlos de manera aislada sin causar aburrimiento. Si a esto le sumas un acompañamiento marino de nivel (vieiras, langostinos y calamar) y en dignas cantidades hacen de este un plato altamente recomendable.
La sección de postres nos creó cierta indecisión con sus rollitos de manzana y canela caramelizados, la tarta fina de plátano con helado de vainilla, el helado frito y la crema de mango con espuma de coco. Nos decantamos por este último y nos pareció un broche final a la altura del resto de la cena.
En definitiva,
Café Saigon nos permite explorar la éxotica cocina indochina en dos espacios completamente diferentes que recrean un ambiente íntimo y acogedor, un ticket medio que ronda los 30€ y un servicio muy personalizado y amable. Un lugar libre de masificaciones, ruido y que te permite entablar una conversación sin alzar la voz... un remanso de paz en nuestra querida Madrid. Además cuenta con servicio de aparcacoches.Si queréis saborear los exquisitos dumplings de pato con boletus y foie a la pimienta de Szcheuan de los que os hemos hablado solo os falta dar el último paso y reservar ("pinchando aquí").
DETALLE DE LA CUENTA:
Rollitos imperiales Café Saigon: 5.50€
Dumplings de pato con boletus y foie a la pimienta de Szcheuan (4 unidades): 12€
Pato crujiente al estilo Pekín servido con sus crepes, verduras y salsa hoisin: 18€
Tallarines al estilo Thai: 14€
Crema de mango con espuma de coco: 6€
Bebidas (x4): 13.5€
Total de la cuenta: 69€ (2 comensales)
DATOS DE INTERÉS:
Café Saigon
Ubicación: Calle de María de Molina, 4, 28006, Madrid, Madrid
Teléfono de contacto: 91
Web: www.cafesaigon.es
RESERVAS
Realizado por Alba y Óscar.