#cafeYProductividad: El placer de la conversación inteligente

Publicado el 12 junio 2016 por Jmbolivar @jmbolivar

«Café y Productividad» es una iniciativa promovida y organizada por Jeroen Sangers, Daniel Aguayo y Jordi Sánchez con el propósito de ofrecer de forma regular un punto de encuentro para la comunidad de bloggers especializados en productividad y efectividad personal. Aprovecho desde aquí para darles la enhorabuena y las gracias tanto por la idea como por su ejecución.

Hasta ahora, me había resultado imposible asistir a las ediciones anteriores, y reconozco que a esta iba con muchas ganas. La experiencia superó con creces las expectativas. Lo primero que me llamó la atención fue el lugar elegido, las oficinas de Liferay en Madrid, de las que pudimos disfrutar gracias al networking y las gestiones de Vanesa Tejada.

Otro detalle que me sorprendió fue el elevado número de participantes. Reunir a 15 personas un soleado sábado de junio por la mañana para hablar de productividad tiene su punto, sobre todo cuando más de la mitad de ellas tenían que desplazarse desde puntos geográficos tan dispares como Barcelona, Lleida, Tarragona, Cádiz, Córdoba, Sevilla o A Coruña.

También me sorprendió gratamente la excelente organización y eso que aquí mis expectativas eran muy altas, conociendo como conozco los estándares de calidad de Jeroen y Dani, que se superaron. Los «icebreaker» elegidos por los organizadores fueron tan entretenidos y efectivos como poco intrusivos, algo muy poco habitual por desgracia, aunque sí esperable en este caso en el que había una amplia representación de introvertidos

Pero de toda la experiencia, lo que más gratamente me impresionó fue la calidad de la conversación. A partir de un sencillo ejercicio para plantear y elegir temas para tratar, comenzó una serie de interesantísimos debates que se prolongaron varias horas, tan solo interrumpidos en una ocasión para tomar – como no – un café.

El primer tema tratado fue hasta qué punto está la sociedad actual preparada para entender y hablar de productividad personal «en serio». Para la mayoría de la gente, la productividad se sigue viendo reducida a sus aspectos más económicos. Para otros, es simplemente un conjunto de trucos y herramientas más o menos llamativo y vistoso. Sin embargo, la experiencia de quienes llevamos años en esto es que el verdadero potencial de la productividad y la efectividad personal es como elemento transformador que te ayuda a lograr resultados y a vivir la vida que quieres vivir.

La conclusión mayoritaria es que todavía se trata de un tema minoritario, aunque con un rápido crecimiento. El sentimiento generalizado es que en los próximos años cobrará mucha fuerza, ya que las condiciones del entorno piden a gritos soluciones de esta naturaleza. Mi mayor preocupación es la proliferación de productividad basura que está teniendo lugar de la mano de oportunistas que se presentan como expertos y que, desde su ignorancia bienintencionada, pueden hacer mucho daño, tanto a las personas con las que trabajan, como a la productividad personal en sí, como ya ha ocurrido en el caso del coaching.

Otro tema del que se habló fue de la fuerza de voluntad versus hábitos. ¿Qué funciona mejor? ¿Qué es más sostenible? Un debate también muy interesante y enriquecedor, con diversidad de opiniones pero con muchos puntos en común.

El tercer tema tratado, y el más polémico, fue sobre la bondad o la maldad de la planificación. Después de explicar los matices de las diversas perspectivas, mi sensación es que – en esencia – la mayoría de los presentes compartíamos la mayoría de los principios generales sobre la inutilidad de inventarse fechas y la importancia de dedicar atención a prever, anticipar, detectar necesidades, evaluar alternativas, explorar oportunidades y, sobre todo, revisar frecuentemente para corregir el rumbo. Me quedé con la impresión de que ni es la primera vez que se habla de este tema ni será la última

Con este último debate se nos agotó el tiempo disponible – me quedé con ganas de más aunque creo que la duración del formato elegido es idónea – y se dio por concluido el evento. Muchos tuvieron que irse y un pequeño grupo nos quedamos a comer y proseguir con la conversación, ya de manera más informal.

Al margen de lo anterior, este «café y productividad» me ha brindado la oportunidad de reencontrarme personalmente con colegas de este mundillo a los que no veía desde hacía tiempo, como por ejemplo JeroenDavid Torné, Enrique Gonzalo o Joaquín Peña; de conocer por fin en persona a varios colegas a los que leo con interés y sigo de cerca desde hace años,como Alejandro Vázquez o Jordi Fortuny; a otros a los que he descubierto más recientemente pero que también han pasado a formar parte de mis imprescindibles, como es el caso de Daniel Grifol o Vanesa Tejada; y de conocer a gente nueva, como William García, cuyo blog acabo de incorporar a mi Feedly.

Y, por supuesto, a compartir otra fantástica experiencia con algunos de mis compañeros y amigos de OPTIMA LAB: Paz Garde, Cruz Guijarro, Antonio José Masiá y Jerónimo Sánchez, con quienes ya había disfrutado de una fantástica cena para «calentar motores» la noche anterior en el restaurante favorito de la red.

Parece que la idea de los promotores es celebrar un par de reuniones como esta al año – un planteamiento que encuentro muy acertado – y yo personalmente, con que la próxima mantenga el mismo «nivelazo» que esta, me daría por más que satisfecho. Porque sí, es cierto, me he quedado con muchas ganas de repetir 

Entradas relacionadas:

  1. El Consejo de los Viernes: Toda Conversación Debería Tener un Fin
  2. El Consejo de los Viernes: No Monopolices la Conversación
  3. Presentación de mi libro sobre Productividad Personal en IMF Business School