El beneficio neto de Caixa Penedès se situó en 2009 en los 40,6 millones de euros (80 millones en 2008) dedicando a dotaciones 253 millones 107 millones en 2008). Su morosidad sobre el total de activos ascendió hasta el 4,83% (medida en relación a la actividad crediticia fue del 5,9%). En 2008 era del 3,42%. Se adjudicó inmuebles por valor de 639 millones (178 millones en 2008). Su dotación a la Obra Social para 2010 será de 6,2 millones (12 millones en 2008).
El ratio de eficiencia alcanzó el 51,7% (54,7% en 2008) mientras que el Tier1 ascendió al 8,9 (8 en 2008), al igual que el coeficiente de solvencia que se elevo al 14,4 (12 en 2008). Por el contrario el ratio de cobertura por insolvencia bajó al 43% (sin garantías) y se estabilizó en el 194% con garantías reales (54% y 194,4% respectivamente en 2008).
Su director general, Ricard Pagés, reconoció que “queremos estar en los procesos de concentración del sector y no nos planteamos permanecer solos”. En este sentido y después que los contactos para una posible fusión a dos con Caixa Laietana no hayan fructificado, ha decidido sacar adelante un proyecto de SIP con entidades de otras comunidades. El proceso está muy avanzado y en un mes puede darse a conocer de manera oficial.
Los márgenes de la entidad se han mantenido en positivo, con un margen de intereses de 360,7 millones, un 4,5% más; un margen bruto que ha crecido un 24,6%, hasta los 579,9 millones; y un margen de explotación que ha crecido un 106%, hasta los 220 millones de euros.
Pese al buen resultado de los márgenes, el grupo ha tenido que hacer unas dotaciones extraordinarias de 172,8 millones de euros, una partida que el año pasado casi era inexistente debido al aumento de la mora que en 2010, estima Pagés, puede alcanzar el 8% (sobre créditos).