La alimentación forma parte el entrenamiento de cualquier deportista. En general, los deportistas buscan alimentos que sean ricos en determinados nutrientes y que además no aporten muchas calorías. El calabacín es un ejemplo perfecto de este tipo de alimentos.
El calabacín es una hortaliza cuyo origen se encuentra en sur de norteamérica y centroamérica. Fue con el descubrimiento de dicho continente, en 1492 cuando se exportó y comenzó a cultivarse en el resto del mundo.
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Propiedades del calabacín
Control de peso
Para un deportista, independientemente del deporte que practique, es muy importante el control del peso. En este sentido el calabacín va a ser un muy buen aliado, ya que el 95 % de su composición es agua.
Al ser casi todo agua va a ser un alimento muy bajo en calorías y que además va a favorecer una buena hidratación.
Recuperación muscular
Este alimento aporta vitamina C. Esta vitamina tiene un gran poder antioxidante. Los antioxidantes tienen la capacidad de combatir los radicales libres, lo cual va a favorecer la recuperación muscular después de un esfuerzo físico.
Antiinflamatorio
El calabacín también tiene propiedades antiinflamatorias. Por lo tanto van a mitigar en parte también los dolores musculares, contribuyendo al igual que la vitamina C a la recuperación de la musculatura.
Control del colesterol y estreñimiento
También es un alimento con un alto contenido en fribra. La fibra va a ayudar notablemente a tener un tránsito intestinal regular, combatiendo así el estreñimiento.
Además este contenido en fibra también ayuda a mantener estables los niveles de colesterol.
Formas de cocinar el calabacín
Otra de las virtudes de este alimento es que es muy versátil. Se puede preparar de muchas maneras.
Se puede comer en crudo en cualquier ensalada, a la plancha con un chorrito de aceite de oliva y sal, al horno sustituyendo las placas de una lasaña por calabacín, etc.