INGREDIENTES
- Cordero: 1 kg - Tomate triturado: 400 gr - Vino blanco: 200 ml - Cerveza: 200 ml - Ajo: 8 dientes - Romero: 1 ramita - Tomillo: 1 ramita - Laurel: 2 hojas - Aceite - Pimienta - Sal
PREPARACIÓN
- Pedimos en la carnicería que nos corten el cordero en trozos pequeños. - Pelamos y cortamos los dientes de ajo en un par de trozos, en una sartén amplia con un chorrito de aceite los doramos ligeramente, retiramos y reservamos. - Salpimentamos la carne y la freímos a fuego medio hasta que esté dorada. - Entretanto preparamos el tomate, lavamos bien los tomates (en casa los pasamos por una trituradora especial para el tomate, así separamos todas las pieles y pepitas) si no disponemos de esta trituradora, podemos escaldar el tomate en agua hirviendo, dejar enfriar, quita la piel y picar. - Cuando la carne esté dorada incorporamos el vino, la cerveza, el tomate, el ajo, el tomillo, el romero y el laurel. - Cocinamos a fuego lento, vamos rectificando sazón, damos vuelta a menudo con una cuchara de madera (con cuidado de que la carne no se deshaga), hasta que la salsa haya reducido y el cordero esté bien tierno, aproximadamente 1 hora. Si la salsa no ha reducido lo suficiente y el cordero está tierno podemos añadir un poco de harina para espesar la salsa.