Como lectora creo que con el paso del tiempo nos volvemos cada vez más y más exigentes en cuanto a nuestras lecturas. En la actualidad hay muy pocas novelas que me sorprendan, que tengan ese componente que tenían las novelas de antes, ese toque de "magia" entre sus páginas. No he dejado de leer romántica adulta porque es un género que adoro pero reconozco que se está publicando mucha cantidad y poca calidad.
Hablando de la poca sorpresa que hay entre las autoras nuevas que aterrizan en nuestro país Samantha Young fue una excepción el año pasado. Calle Berlín lo comencé como el resto, con ganas de disfrutar de una historia sencilla pero que no dejaría mayor huella en mí. Me equivoque totalmente. Tras ella llego Calle Edimbugo - muy floja pero era relato corto - Calle Londres, que aún no he leído y este mes se ha publicado Calle Jamaica. Lo primero a destacar de la novela es la maravillosa relación de amistad, casi familia que se ha formado entre todos los protagonistas de las novelas. Tienen una unión muy especial, una amistad leal y llena de confianza absolutamente envidiable. Por tanto todos, en mayor o menor medida, son parte importante de esta historia. Olivia y su padre se trasladan a Edimburgo tras la muerte de su madre con el propósito de alejarse del dolor y comenzar una nueva vida. A pesar de su juventud y atractivo Olivia se siente insegura y es incapaz de acercarse al sexo opuesto. Nate es el mujeriego del grupo, el picaflor y su mejor amigo. Es por eso que decide instarle a que la ayude a tener más confianza en si misma y sobre todo a saber como comportarse con los hombres. Decidida a conquistar a un atractivo estudiante que se encuentra cada día en su trabajo. El argumento puede parecer simple - lo es - e incluso superficial pero lo cierto es que a medida que vas leyendo la novela vas descubriendo el verdadero significado de la personalidad tanto de Nate como de Olivia. Ambos tienen heridas causadas en el pasado que se han quedado grabadas a fuego en su corazón, en el caso de Nate prácticamente literal. Ambos han sufrido mucho y eso ha repercutido en la persona que son la actualidad. La relación entre ambos empieza como un juego, como unas clases de seducción pero lo cierto es que ambos son conscientes que siempre ha habido algo más. Comparten lo mejor de la pareja y de los amigos: la pasión, los sentimientos, las confidencias, las tardes de película y palomitas, las bromas, los piques...son la pareja perfecta. Pero Nate es incapaz de comprometerse con nadie y dejar de lado sus conquistas. Llega entonces la parte difícil de la historia, la realidad, el dolor y los corazones rotos. Calle Jamaica es una novela absolutamente preciosa. Una historia fascinante de la que se es imposible - creedme que lo intente - escapar hasta terminar la última página. La segunda oportunidad, la historia de amor tierna y apasionada entre dos personas que se creían condenadas a estar solas. Una autora de las de ahora pero con el toque de las de antes, con magia en su narración y sentimientos que traspasan las páginas para llegar al lector y dejarlo absolutamente enamorado. ¿En definitiva? La novela perfecta para las amantes de la novela romántica.