Callejeando por París

Por Pablosolorzano


Vamos. Es hora de continuar nuestras andanzas por la vieja, fascinante y enloquecida París. El primer día de nuestro viaje ya habíamos recorrido, hasta acabar exhaustos, las zonas de LES INVALIDES junto a LES CHAMPS ELYSÉES, además de LES TUILERIES y L´OPERA (ver entrada anterior). El segundo día, sobre el que versará esta entrada, la pasamos caminando en la parte más vieja de París, es decir por aquella donde empezó su historia como ciudad. Empezamos la ruta en el barrio de LE MARAIS y continuaremos hasta la floreciente zona llamada BEAUBOURG para acabar en la ultra conocida ÎLE DE LA CITÉ desde donde avanzaremos hasta una isla más pequeña y menos conocida pero encantadora: la Île St-Louis. Empecemos.
Iniciamos la caminata de este día en la Place de la Bastille (hay una parada de metro allí que se llama justamente Bastille) a la que fuimos más por curiosidad histórica que atraídos por cualquier cosa que allí hubiese. Es una plaza sin mucho encanto y si uno busca el edificio de la Bastilla, con cuya toma se inició una de las grandes revoluciones de la historia, no encontrará nada de ello porque se destruyó. Solo se puede ver allí una columna de 53 metros que recuerda a las víctimas de la Revolución de 1830 y la OPERA NATIONAL BASTILLE.

Place de la Bastille. París - Francia.


Espiritismo, lujuria, muerte y coleccionismo en la plaza más bonita del mundo
Desde esta plaza tomamos la avenida Rue St. Antoine que nos llevó en unos minutos hasta la RUE DE BIRAGUE por donde entramos a la PLACE DES VOSGES, al que muchos consideran una de las más bellas del mundo. Quizás porque es perfectamente simétrica, por lo caro que es la renta o a saber por qué. Yo lo encontré muy bonita pero tampoco tanto como para decir que es la más bella del mundo. Hay allí 36 casas, todas de igual color y estilo, coronadas con unos techos de pizarra donde resaltan ventanillas y chimeneas. Estos edificios se levantan sobre macizas arcadas bajo las cuales hay varias (carísimas) tiendas de antigüedades y de arte. La casa más famosa en este sitio es la del Víctor Hugo, ubicada en el número 6. En este lugar vivió el gran escritor entre 1832 y 1848 y allí no solo escribió gran parte de LOS MISERABLES sino que también se dedicó a hacer espiritismo, algo por lo demás muy corriente en aquella época. Hoy su casa es un museo que se puede visitar. 

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Pero el gran Hugo no fue el único famoso que vivió aquí; también fueron vecinos de esta plaza los escritores Théophile Gautier (cuya tumba visitamos en el cementerio de Montmartre, sobre el cual escribiré una entrada muy pronto) y Alphonse Daudet quienes vivieron en la casa número 12. Y en la 21 habitó el todopoderoso Cardenal Richeliu, desde aquella casa dirigía los destinos de Francia mientras era constantemente visitado por damas junto a las cuales se dedicaba al placer de desordenar las sabanas... los Cardenales, ya se sabe... Otros vecinos muy dados a este enjundioso placer fueron los duques de Sully quienes compraron el impresionante edificio en el que ahora está el hotel que lleva su nombre: allí ambos recibieron a amantes y demás fogosas amistades. Y si los gemidos eran música común intramuros, fuera, en las inmediaciones del parque, también lo era aunque el motivo que la causaba era completamente distinto: los duelos de espada con el que los hombres de París arreglaban sus cuentas. Como ven la plaza tiene un encanto que va más allá de lo arquitectónico: se fusionan allí historia, gran literatura, arte, sexo, sórdidas historias de violencia y tragedia; mezcla a la que la modernidad ha añadido arte y coleccionismo. 

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.

Place des Voges. París - Francia.


Entre pantanos…
Salimos de la Place des Vosges a través de la RUE FRANCS BOURGEOIS, calle que se empezó habitar en 1334 y en donde se ubicaban los asilos de los francs (pobres); por allí caminamos una muy buena cantidad de metros. Ya estamos en el corazón de LE MARAIS una antigua zona pantanosa (marais significa pantano) que fue en su momento una zona de gente adinerada que abandonaron el sitio tras la revolución de 1789 expulsados por los sans-culottes (clases populares revolucionarias); ya se saben eso de que los pobres se rebelan para quitarles sus casas a los ricos, hasta que vienen otros pobres y se los quitan a ellos: la historia del mundo. En los años 60´s del siglo pasado se recuperaron muchos de los edificios que allí habían y hoy el barrio es un lugar de moda con boutiques elegantes y exclusivos restaurantes. La Rue Francs Bourgeois nos lleva por las puertas del edificio de los ARCHIVES NATIONALES, delante del cual pasamos.

RUE FRANCS BOURGEOIS. París - Francia.

RUE FRANCS BOURGEOIS. París - Francia.

ARCHIVES NATIONALES. París - Francia.

Un par de calles más allá, siempre por la Francs bourgeois, y llegamos a la esquina con la RUE BEAUBOURG desde donde nos sorprende la vista de un amasijo de tubos, cables, conductos cubiertos de vidrios y demás delirios vanguardistas: es el CENTRE GEORGES POMPIDOU que a primera vista parece un edificio vuelto al revés: es decir que parece que sus interiores, conductos, escaleras y todo aquello que forma el esqueleto de esta construcción haya sido sacado para afuera y la fachada puesta hacia dentro lo cual le da un toque bastante original y moderno no por algo alberga el Museo de Arte Moderno.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

Detrás de este alucinante centro cultural hay una pequeña plaza en cuya larga fuente hay esculturas multicolores que se mueven constantemente gracias a un oculto mecanismo. Los niños se vuelven locos mirando estas cosas.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

 CENTRE GEORGES POMPIDOU. París - Francia.

Desde esta placita sale la estrecha  RUE ST MARTIN que nos lleva hasta el encantador SQUARE DE LA TOUR ST-JACQUES, un pequeño parque donde está la TOUR DE ST-JACQUES un atractivo que casi nadie viene a visitar, razón por la cual el lugar es tan tranquilo y encantador. Dato: es uno de los pocos parques donde encontramos baño público... ¡aprovecha que escasean! La torre, que es lo que queda de una iglesia medieval, es imponente. Cosa curiosa de saber es que ese edificio era el punto de encuentro de los peregrinos que se iban a Santiago de Compostela. Se sabe que Blas Pascal solía hacer experimentos barométricos en este lugar.

TOUR DE ST-JACQUES. París - Francia.

TOUR DE ST-JACQUES. París - Francia.

Islas laberínticas
Desde aquí tomamos la larga RUE DE RIVOLI para llegar sin desviarnos hasta el fastuoso HOTEL DE VILLE o el Ayuntamiento a cuyas espaldas está el Sena. Hacia allí bajamos. Ya tenemos frente a nosotros la ÎLE pero no cruzamos inmediatamente pues preferimos caminar un poco por el borde del río hasta llegar al PONT NEUF ya que queríamos cruzar a la isla a través del puente más viejo de la ciudad, aunque, cosa curiosa, su nombre signifique “puente nuevo”.

HOTEL DE VILLE. París - Francia.

HOTEL DE VILLE. París - Francia.

HOTEL DE VILLE. París - Francia.

HOTEL DE VILLE. París - Francia.

PONT NEUF. París - Francia.

PONT NEUF. París - Francia.

PONT NEUF. París - Francia.

Es increíble que en un espacio como el de La ÎLE DE LA CITE, que no es tan grande, puedan caber tantos y tan increíbles edificios. Es este sitio el que hace de París una ciudad única pues, hasta donde sé, no son muchas las capitales que tienen en medio de su principal río islas en las que una gran parte de la ciudad se ha asentado y desde donde se le ha imprimido un carácter que las diferencie del resto. Empezamos la visita a la isla desde la punta en la que se encuentra la inmensa CONCIERGERIE, el PALAIS DE JUSTICE y la SAINTE-CHAPELLE al que no entramos por falta de tiempo, cosa de la que ahora me arrepiento. En fin, luego de caminar por las calles de la isla llegamos hasta la grandiosa NOTRE DAME. Otro de esos lugares de los que se ha dicho demasiado, de los que abundan fotos e imágenes y que gracias al gran Víctor Hugo ha pasado a ser parte de la leyenda romántica al imaginar allí a un inolvidable jorobado. El sol le daba de lleno en la cara este donde las quimeras iluminadas se veían menos amenazantes y brillaban los rosetones que despedían fulgores azules y rojizos. En la fachada oeste, que yacía en las sombras, se entrelazan imágenes de santos decapitados, demonios de gesto malévolo, ángeles hieráticos y seres torturados que forman en conjunto el grandioso pórtico de la virgen. 

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

A la espalda de esta mole gótica se ubica la SQUARE JEAN XXIII que es un bonito jardín con una fuente neogótica, lugar ideal para contemplar la parte este de la catedral y ver así sus espectaculares arbotantes de 15 metros. 

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

NOTRE DAME. París - Francia.

Desde allí sale el PONT ST-LOUIS que lleva hasta la isla del mismo nombre. La  es un remanso de tranquilas calles que parecen detenidas en el tiempo. Hay en esta isla tiendas muy elegantes y muchísimos restaurantes; tantos que debe ser uno de esos lugares en el mundo en que hay más restaurantes por calle. Jamás en mi vida había visto tanto establecimiento de comida junto. La gran mayoría de ellos eran bistrós pequeñísimos donde apenas entraban 6 o 7 mesas y donde imagino deben ofrecer platos originales que se sirven a una clientela conocedora, de elegante paladar y que describe las delicias de su plato como si se hablara de un verso de Rimbaud. 

ÎLE ST-LOUIS. París - Francia.

ÎLE ST-LOUIS. París - Francia.

ÎLE ST-LOUIS. París - Francia.

ÎLE ST-LOUIS. París - Francia.

ÎLE ST-LOUIS. París - Francia.

Desde esta pequeña isla se puede cruzar, a través del PONT DE LA TOURNELLE, a la mítica “RIVE GAUCHE” (orilla izquierda), zona que describiré en la próxima entrada en la que contaré sobre la ruta que nos llevó tras los pasos del escritor peruano MARIO VARGAS LLOSA, gran parte de la cual se desarrolla en toda esa parte de la ciudad. Hasta entonces.
Pablo