Son los 80. Noche de fiesta. Un grupo de chicas deshinibidas se cruzan con un grupo de chicos carne de presidio. Ellos les tocan las narices a ellas, y ellas les devuelven la jugada, robándoles el descapotable. A partir de ahí, venganza y violencia a raudales. Y Linda Blair embutida en cuero y armada hasta los dientes. ¿Dije que eran los 80?.
La verdad es que sé que esta película no pasará a los anales de la Historia del Cine. Sé que tiene un guión más bien flojete y chirría en muchos aspectos, sobre todo en la dirección de actores. ¡Pero lo que la he disfrutado!.
Se trata de una producción americana emblemática de aquellos lejanos años 80, con un argumento de venganza extrema muy similar al de otros productos (y subproductos) del estilo de Yo soy la Justicia (Death wish II,1982), secuela de El justiciero de la ciudad (Death Wish). También recuerda a títulos como Carrie, o ese clásico ochentero titulado Curso 1984 (Class of 1984,1982).Por no decir que copia a películas como Switchblade Sisters(1975), otra grindhouse digna de revisarse.
Rodada íntegramente en Los Angeles, Tom DeSimone, especialista en cine turbulento con cintas como Angel III, Noche Infernal o Reform School Girls, rodó unas pocas escenas antes de desvincularse de la producción. Debido a ello, y durante el parón, algunos de los intérpretes abandonaron el rodaje, detalle que se puede ver en el transcurso de la película, cuando alguna chica desaparece misteriosamente del grupo de amigas. Continuó filmando por encargo de la productora Danny Steinmann, director casi novato con sólo dos películas en su haber, la primera de ellas un filme pornográfico titulado High Rise, y la otra Gemidos en la oscuridad, filme de terror que no tengo la suerte de haber visto. Su siguiente y última película sería Viernes 13 parte V (1985), de la que poco puedo decir bueno, así que mejor me lo callo.
En cuanto a Calles Salvajes (Savage streets), tiene el encanto de la época y de contener uno de esos argumentos y guiones disparatados y desatados, repletos de violencia juvenil injustificada, además de contener desnudos de la actriz protagonista y de la hermana de ésta en la ficción. Si bien, la interpretación de la Blair es de todo menos buena, su presencia llena la pantalla y la redime convirtiéndola ante nuestros ojos en un mini-mito erótico. La propia actriz reafirmaría ese status participando en producciones como Rejas ardientes (1983) o Red Heat (1985) , esta última junto a Sylvia Kristel, casi nada. En Calles Salvajes no falta la escena de lucha con el elenco de actrices semidesnudas entre otras chicas desnudas en su totalidad. Ni falta hace decir que me declaro fan incondicional de Linda Blair y de todos los exploitation films en los que aparece.
En cuanto a este detalle de erotismo en Calles Salvajes, hay que considerar que la película se presentó en sociedad con diferentes recortes. La versión más corta (en el Reino Unido) alcanza 80 minutos, frente a los 93 con que se ha reestrenado en dvd hace unos cuatro años, como Special Edition (2 discos con los comentarios y entrevistas de turno). La película tuvo que estrenarse en su época con una R (Restricted – Under 17 Requires Accompanying Parent Or Adult Guardian), así que la escena de Linda Blair en la bañera fue fulminada. La violación de la hermana por parte del gamberro de turno también es fuerte gráficamente, y fue suavizada en su versión original.
El clímax de la película, con Linda Blair ballesta en mano y su ajustado y escotado uniforme de cuero es el plato fuerte de la película, una de esas escenas que obligan a silbar y aplaudir al respetable. Violencia desatada en estado puro. Un clásico del cine gamberro.
De sus actores con variadas interpretaciones a cual más desatada, destaco a Linnea Quigley, reina del grito (Scream Queen) de las peliculas de terror de los 80 y con una legión de fans a sus espaldas, que en esta película enseña sus bellezas, y que curiosamente hace el papel de la hermana muda de la protagonista.
Otro papel de peso, el de director de la escuela, lo interpreta John Vernon(1932-2005), veterano actor canadiense, que muchos recordarán por su breve aparición en el juicio de Aterriza como puedas II, haciendo de doctor.
Lean, lean, estas desquiciadas líneas del diálogo de la parte final, con Brenda (L.Blair) y Fargo (Sal Landi) en plena confrontación:
Brenda: Fargo, ¿dónde estás?
Fargo: Bien, bien, bien. Miren quién está aquí. Se acabó el juego, puta. Esta vez, date por muerta.
Primero: te voy a coger, y luego…
…te voy a cortar en pedacitos.
Brenda: A mí me suena bien y excitante. Es una lástima que no seas más flexible.
Fargo: ¿Por qué?
Brenda: Porque si así fuese, podrías darle un beso de despedida a tu culo.
Una última curiosidad. El título alternativo durante su rodaje fue Zombie Brigade.
En fin, con esto queda todo dicho de este clásico del más salvaje y callejero cine de los 80.