Muy importante es el aporte de Brendan Gleeson en este film llamado Calvariocuyo desarrollo le hace honor a su título. Guión y dirección de John Michael McDonagh, hermano de Martin, aquel encargado de cintas como In Bruges y Seven Psychopaths. Ambos directores tienen un modo similar en cuanto al tono con el que tiñen sus productos, con pinceladas de un singular humor negro de esos que no suscitan risas pero definen un estilo.James (Gleeson) es un cura que un día recibe una amenaza de un sujeto que acusa haber sido víctima de abusos sexuales por parte de un sacerdote cuando era pequeño. Así comienza Calvario, con una escena inicial que impacta apenas pronunciada la primera frase de la narración. Crudas y fuertes son las confesiones que da este feligrés, incomodando además al espectador. Lo provee a nuestro protagonista de unos días para que ponga en orden sus asuntos y luego lo asesinaría el domingo porque “matar a un cura inocente sí sería noticia”.
LO MEJOR:Brendan Gleeson, de convincente y entrañable interpretación. Acompaña en buena forma Kelly Reilly. Los diálogos, la forma en que está contada la historia.LO PEOR:algunas secuencias tal vez de relleno.
PUNTAJE:7