Camasobres, buena Posada

Por Monpalentina @FFroi

Todo va bien hasta que alguien recurre al daño gratuito, al daño por el daño. A mí me llegó la noticia, como a muchos de ustedes, de que Sanidad había cerrado La Posada de Fuentes Carrionas. Indagué un poco más y ya comenzaron a salir demasiadas irregularidades como para tomárselo en serio. Alguien había lanzado un bulo con la intención de hacer daño.

"A nosotros los cubanos nos enseñaron que la vida no es una carrera de velocidad sino de resistencia". - me dice, al responderme a todas esas dudas que yo tenía y que quise despejar presentándome un domingo en el establecimiento.

A Felipe, este cubano amable, también le llegan dardos envenenados, que de todo se guisa en esta tierra nuestra. Y cuánto daño gratuito se hace.

Esta casona, que fue en el siglo XVIII vivienda de los barones de la comarca de Pernía tiene un hermoso jardín que Felipe ha aprovechado para colocar una gran carpa.

Comenzó, como quien dice, de la nada, porque a pesar de todas las comodidades que se publicitaban sobre la Posada, era un lugar inicialmente concebido para convenciones, cursos y seminarios y, enseguida, su actual arrendatario le dio la vuelta, de manera que, sin olvidar las pretensiones de quienes lo abrieron primero (el 17 de octubre tenía lugar un encuentro de veterinarios), aprovecha el espacio para bodas y eventos.

No hace mucho, alguien bajó diciendo que se había intoxicado con algún alimento. Posteriormente, otros lo adornaron, asegurando que la intoxicación se produjo en una boda. Ya saben ustedes cómo corren las noticias, aprovechando otros para engordarlas, asegurando que hasta los empleados habían sido víctimas.

Incluso, se dijo que, el propietario había dado con la puerta en las narices a los mismos inspectores de Sanidad. Y es más, una cadena de radio de nuestra capital se hizo eco de aquello que no había pasado o que, en cualquier caso, no pasaba de ser un malestar sin importancia que ocurre de vez en cuando en restaurantes de todo el mundo, a pesar de ser cada vez más exigentes con el tratamiento y cuidado de los alimentos.

De la sección "La Madeja", en "Diario Palentino", @2016