Vivía feliz hasta que su padre murió de frío y de sed, ya que en el hospital no había de eso desde que Rajoy se las llevó todas a su casa. Tardó 3 años en quejarse de eso.
En 2013 ganó un Goya, que en realidad le pertenecía a Chus Lampreave, pero ese año se hicieron un lío con los sobres. Lo más probable es que le preguntaron a Chus si tenía un discurso demagógico y como no lo tenía se quedó sin el premio. Eso sí, cuando ganó el premio el dinero
Como en los últimos años no había tenido mucho trabajo, quiso hacerse miembro del sindicato de la ceja para tenerlo, aunque si para lograrlo tuviese que usar la memoria de su padre e inventarse una lacrimógena historia sobre su muerte. Para el año que viene tenía pensado cargarse a su madre para que le dieran otro Goya. Lástima que no le dieran el Goya 3 años, cuando murió su padre y nos hubiéramos enterado antes de estas cosas. A no ser que si lo hubiese ganado y que había otro partido en el gobierno o que no había recortes por esa época. Porque de ser así, su discursito sería una desfachatez. Si hubiera sabido que Maribel Verdú era accionista de una clínica privada, a su padre no le hubieran faltado mantas.