Haberlos ahílos, je je je
En la zona de Zamora lo pude ver por primera vez en vivo y en directo.
En un helado día de nieve, allí estaba en un campo cercano a la carretera, y en cuento nos vio u oyó, se lanzó a poner los pies en polvorosa y no tuvimos más oportunidad que verlo fugazmente unos metros más allá y luego otros más adelante y perderse en medio de los campos nevados.
Y nos quedamos encantados y un poco alucinados por esta sorpresa final del viaje a Galicia.
De fotos nada de nada como podréis imaginar solo la visión y el recuerdo del bicho de color oscuro destacaba gratamente sobre el blanco de los campos y del camino.
un poster del mismo.