Capítulo 11: Un desbarajuste mediático

Por Ireneu @ireneuc

"20 años, 20 historias"-Capítulo 11: Un desbarajuste mediático

El hecho de seguir publicando con asiduidad hizo que durante 2015 el blog continuara ganando en visitas y en adeptos. Tal vez no eran los auténticos tsunamis de visitas del efecto Menéame del año anterior, que tan pronto subían hasta llegar a niveles estratosféricos como bajaban en cuanto había pasado la ola, pero, aún así, el promedio se mantuvo con unas 1.000 visitas diarias. Esto hizo que mi presencia en redes se multiplicara, a la vez que se multiplicaban también mis apariciones "estelares" en los medios de comunicación más variados. Me hice más conocido que La Moños.


Mientras que las antiguas movilizaciones por el Canal de la Infanta se amortiguaban por el hecho de que ya se habían cargado lo que queríamos preservar, este mismo se trocó en un nuevo movimiento por la defensa del que era (hasta entonces) el árbol más antiguo de la ciudad: el Pi de la Remunta.

Este árbol, de unos 150 años, se podía ver en la terraza cuaternaria a la que se accedía por el puente que conseguimos salvar, y que se encontraba paralela al cauce del Canal de la Infanta a su paso por el cuartel de La Remonta. El inconveniente era que se encontraba en un espacio en el que se tenía que construir un magnífico -y feísimo- mamotreto de cemento armado y tabiques de pladur. ¿Y quién se puso otra vez delante de los leones? El nene, el nene.


El pino molestaba para el gran negocio inmobiliario de la zona, ya que implicaba que, si conseguíamos que se quedase en el sitio, la Generalitat, no solo no se repartiría las pingües comisiones que les correspondían por los pisos, sino que, encima, tendría que pagar indemnizaciones por obra otorgada y no cumplida- cosa que, por otro lado, siempre he encontrado un abuso intolerable. Las excusas para cargarse el árbol al precio que fuera, fueron de todo tipo y color -ninguna con fundamento todo sea el decirlo- y conseguimos llevar el caso hasta el Parlamento Europeo. Os recomiendo que leáis este artículo que le dediqué a todo el caso: ver El Pi de la Remunta, la indignante historia de un monumento natural que acabó en la basura.


En medio de todo este follón, con apariciones -otra vez- en los medios locales y generalistas, el blog se quedó un poco desatendido, si bien no me impidió de llegar al primer millón de visitas en mayo de 2015 y publicar un total de 87 artículos durante aquel año, en vez de los 187 que había publicado el año anterior. Si ello no fuera suficiente, desde la asociación L'Avenç de Cornellà me propusieron participar en un libro coral en que explicaría la historia del Canal de la Infanta en el tramo de L'Hospitalet y el de Sants (que podéis ver en la sección Mis libros de Memento Mori). Como podéis fácilmente imaginar no dije que no. Pero no acabaría aquí el " desbarajuste" mediático.


A las entrevistas por lo del pino se sumaban las escurriduras de la presentación de La Cara B de la Historia y diferentes entrevistas que tenían como base algunos de los artículos virales que había publicado en el blog. De esta forma participé en varios programas de Radio Valira (del principado de Andorra) y en Catalunya Ràdio, en el programa "Les mil i una nits" de Maria de la Pau Janer, explicando el desconocido -para ellos, claro- Kamasutra catalán ( ver Speculum al foder, el olvidado Kamasutra catalán). Añadamos mis colaboraciones a revistas de divulgación histórica como Clío Historia, El Octavo Sabio, varios digitales y trabajillos para editoriales de renombre, tales como Santillana, Océano o Salvat... y podrán comprender cómo mi cabeza y mi agenda era lo más parecido a las maracas de Machín que pudieran encontrarse por aquellas fechas. No obstante, la tuerca aún daría un par o tres de vueltas.


A mediados de aquel año, me contactó la Editorial Foc para poder lanzar al mercado un e-Book recopilatorio de artículos de Memento Mori que estuvieran dedicados a temática catalana. Por aquel entonces, los libros electrónicos eran una novedad en alza que parecía que se acabaría por comer la industria editorial en papel y no dudé, ante la oportunidad, de apuntarme al experimento. ¿Quién dijo miedo?


Ante este mogollón que gestionaba como malamente pude, saqué tiempo para apuntarme a un curso de arqueología romana que organizaba la Universidad de Barcelona y que me pareció interesante. La sorpresa fue mía cuando, esperando a entrar al lado de la puerta en la primera clase, se me acerca la profesora que lo impartía, la doctora Jordina Sales, y me aborda... "¿Tú eres Ireneu, el del blog?¿No?" Me quedé patidifuso. Resulta que uno de los artículos que se había hecho viral tiempo atrás, dedicado a la posible ubicación del anfiteatro romano de Barcelona, se había basado en su trabajo, y me reconoció. Por suerte soy bastante escrupuloso con el uso de las fuentes, y me felicitó por el artículo, porque si hubiera sido un " hater" ( ver Capítulo 3: Comentarios y Trolls) me habría pillado totalmente desprevenido. Curiosamente, en el mismo curso, estaba el actor del Polònia de TV3, Cesc Casanovas, que, por popular, se llevaba todas las miradas de los (y sobre todo, las) asistentes. Yo, nunca he sido muy mitomaníaco, por lo que el hecho de tener a alguien conocido cerca, tampoco me ha vuelto demasiado loco. Más que nada porque pienso que ya bastante tienen con lo que les ha caído encima como para molestarlos más, por lo que ni tan siquiera me acerco. En una salida a Tarragona, en que lo tenía al lado, se me acerca y me dice..."Tú tienes un blog", a lo que yo respondí "y tú sales en la tele"... y nos dimos la mano. Desde entonces tengo una buena amistad tanto con Jordina Sales como con Cesc Casanovas, de tal forma que la primera ha colaborado alguna vez en Memento Mori y el segundo ha sido el prologuista de mi último libro " Pobles Medievals de Catalunya".


Aquel año estaba siendo realmente movidito, pero a la salida de una entrevista que el geógrafo Jaume Sans me hizo en Ràdio Sant Boi a cuenta (cómo no) de unos artículos publicados en el blog, me presentó al periodista y escritor Amadeu Alemany, el cual me ofreció la posibilidad de participar en un curioso invento...


La semana que viene os lo cuento.