Carga cognitiva, atención y escoger mi siguiente acción

Publicado el 03 marzo 2019 por Davidtorne @davidtorne

Algo a cambiado. Tengo un problema severo algestionar mi trabajo según la atención y la carga cognitiva asociada a mis responsabilidades.

No le saco todo el jugo que le podría sacar a trabajar por contexto. No me aporta la claridad ni los resultados que me aportaba antes. Antes, cuando sufría esta asíncrona los replanteaba ahora pienso en abrirme a formas diferentes de organizarme o quizá cambiar el proceso para escoger mi próxima acción.

Trabajar por contexto

En el blog ya he hablado extensamente sobre el concepto contexto. Se trata de etiquetar las acciones a realizar de forma inminente – próximas acciones – con el recurso/herramienta que permita realizarlas para usarlo como criterio para acceder a la lista de forma segmentada.

Si accedo al contexto #ordinador visualizaré una lista breve de acciones, facilitando la concentración y la fluidez al realizar las actividades. Economizas tu atención y evitas la dispersión de saltar entre acciones de diferentes ámbitos o que no puedes realizar por falta de acceso al recurso o la ubicación indicada por el contexto.

Aquí tienes un post para ampliar sobre el concepto: El efecto multiplicador de trabajar por conceptos

Porque no me funcionan los contexto por recurso

Getting Things Done (GTD) utiliza la definición de contexto antes mencionada. Listas breves agrupadas según un recurso necesario para realizar sus acciones.

Ordenador, Internet, Llamada, Email, Oficina, Casa, Mi jefe de departamento … serían algunas de las opciones en las que todos podríamos tener dividida nuestros asuntos pendientes.

Es un sistema tremendamente eficiente para aquellas personas que disponen de diversos ámbitos de trabajo pero ¿Qué pasa cuando trabajas con un número de contexto muy reducido?

Como programador no dispongo de un gran número de contextos. Ordenador Y como contexto muy residuales: Internet, Mail, Llamada. No puedo estructurar mis responsabilidades en listas breves partiendo de este criterio. Pierdo toda la fuerza que me aporta el recurso.

Organizarse en bloques de atención

En el libro Deep Work de Cal Newport, el autor comenta su forma de organizarse. Lo hace con un sistema de bloques de tiempo. Divide su día en bloques para su trabajo más exigente, el trabajo más superficial y tareas que impliquen conectividad.

Los bloques para el trabajo más exigente están reservados para aquellas acciones o proyectos que requieren un mayor nivel de atención y de energía. Los dedicados a trabajo superficial son para trabajos necesarios pero con un nivel menor de exigencia cognitiva: tareas administrativas, preparar el trabajo o responder al mail.

Finalmente realiza una distinción por aquellas acciones o tareas que requieren de conexión a la red para ser resueltas. Al conectarme uno tiende a dispersarse por tanto este tipo de acciones hay que realizarlas con unas condiciones especiales (limitación de tiempo por ejemplo).

Lo que propone Newport se parece a trabajar con el nivel de energía de GTD.

Nivel de energía y carga cognitiva

¿Qué es el nivel de energía de GTD? Es el nivel de carga cognitiva necesaria para realizar una acción. En otras palabras, qué nivel de atención y concentración es necesario para resolver una acción.

El nivel de energía/atención de una acción determina en qué condiciones se realiza: Nivel de aislamiento necesario, capacidad de razonamiento a desplegar …

Si combino el sistema de bloques para exigencia con mi sistema de listas administrado con GTD, la energía de que dispongo se convierte en el primer criterio para decidir qué es lo siguiente que haré.

  Primero filtraré las próximas acciones por nivel de energía, después por el recurso / contexto GTD del que dispongo o trabajo en ese momento y finalmente por el tiempo de las acciones.

Hoy en día la atención es el centro de la efectividad. Vivimos en una economía de la atención, el objetivo de cualquier elemento que interviene en nuestras vidas es capturarla, donde cada actividad – de trabajo u ocio – nos carga cognitiva y agota la capacidad finita de concentración de la que disponemos.

Seleccionar la actividad teniendo en cuenta “energía” y contexto me parece un criterio más ajustado a la realidad actual. ¿Qué piensas? ¿Has tenido problemas similares? Si es así ya sabes que puedes dejarme tu comentario.