La carga mental afecta a un gran número de trabajadores en el mundo, especialmente porque existe una tendencia a la exigencia, donde se espera que los empleados puedan ejecutar diversas tareas con éxito en medio de múltiples tareas bajo presión.
¿Qué es la carga mental?
Carga mental
Es la tensión y alteración del sistema nervioso que una persona experimenta al realizar ciertas labores que implican un predominio del uso del pensamiento. Hay muchos factores que inciden en la carga mental, lo común es que el nivel de exigencia, atención, decisiones y eficiencia sobrepasen la capacidad de respuesta de una persona.
La carga mental puede tener efectos negativos sobre la salud, en algunos casos las consecuencias han sido desastrosas. Por eso tú debes analizar tus características personales antes de involucrarte en ciertas actividades, si no eres capaz de soportar la más mínima presión, jornadas extenuantes y múltiples responsabilidades, lo mejor es que evites el tipo de situaciones que estás seguro que te causarán un gran estrés emocional.
Los factores que inciden en la carga mental:
Hay muchos factores que inciden en la carga mental y hay puestos de trabajo que son insoportables para ciertas personas, mientras que otras lo desempeñan con bastante tranquilidad, los factores que inciden en la carga mental son:
- La edad de la persona:
Existen varias excepciones, pero está comprobado que la edad tiene una relación directa con el desempeño, existe un rango de edad, donde la productividad de una persona es mayor, cuando se está en edades avanzadas, la fuerza física va disminuyendo considerablemente y la capacidad de respuesta también. Es poco común encontrar a personas de muy avanzada edad dirigiendo puestos de trabajo con muy altas exigencias. Las personas muy jóvenes pueden tener la energía, pero quizás no se tenga la suficiente madurez y experiencia para aprender a manejar situaciones complejas.
- El tiempo de respuesta esperado:
La carga mental surge continuamente por este factor, porque las empresas están dispuestas a pagar mejores salarios a las personas que sean capaces de dar excelentes respuestas en el menor tiempo posible. Cuando hay un cúmulo de tareas a las cuales es necesario darles una respuesta adecuada, entonces llega un momento en que las capacidades cognitivas se ven seriamente afectadas, porque la capacidad del cerebro para procesar información y tomar decisiones es limitada, aunque esa capacidad varía en las personas.
- El tipo, calidad y cantidad de información para la toma de decisiones:
Existen una enorme diversidad de empleos, la carga mental también se ve afectada por la información que se recibe para la toma de decisiones. En algunos casos la información es sencilla, pero el volumen es alto, en otros casos hay bastante incertidumbre en la información, pero aún así hay que tomar decisiones, algunos análisis son mucho más complejos, etc. Se pueden combinar diferentes situaciones. Pero en la mayoría de casos se exige pensar y actuar con rapidez.
- La experiencia:
Cuando hay suficiente experiencia, entonces aumenta la eficiencia y existe una TENDENCIA MENTAL favorable basado en la costumbre a enfrentar ciertas situaciones. La experiencia técnica es fundamental, pero también lo es, la experiencia en la administración de las emociones. Para aprender a soportar mayores niveles de carga mental, es necesario someterse a ella.
- La aparición de la fatiga:
Una persona puede comenzar a ejecutar muy bien una tarea durante algunos días, pero esa misma labor ya puede generar algún tipo de fatiga física o mental. Después de estar sometido a labores extenuantes por un período prolongado, la carga mental puede ser muy alta y la persona está buscando la manera de liberarse de esa tensión.
- La personalidad:
Existen personas con una gran iniciativa y que disfrutan estar en un continuo movimiento, son capaces de administrar labores simultáneas con éxito. Sin embargo otras personas no tienen esas capacidades y son más eficientes en labores menos exigentes, más creativas, pero con respuestas a un plazo mayor, etc. Un cambio de personalidad es posible, pero tú debes analizar muchas cosas, antes de someterte a un aprendizaje, si administrar con eficiencia una gran carga mental es esencial para tu VISIÓN PERSONAL, entonces te esforzarás por conseguirlo, de lo contrario, una sabia decisión será buscar un trabajo que se ajuste a tus características.
- La vinculación emocional a la labor:
Está científicamente comprobado que cuando no se está a gusto con una labor, la fatiga aparece mucho más rápido, tanto la física como la mental. Por lo tanto nunca debes cometer el error de buscar forzar una adaptación a algo que en el fondo no te gusta. Busca lo que amas hacer y la carga mental será mucho menor.
- El ambiente psicológico:
El ambiente psicológico influye mucho en la carga mental, en los casos que exista hostilidad entre los compañeros de trabajo, mala comunicación con los jefes, formas de presión inadecuadas, amenazas, etc. Entonces esas condiciones llevarán a una aceleración de la carga mental.
- El ambiente físico:
Los lugares desordenados, ruidosos, con inadecuada iluminación, exceso de calor o frío, etc. También influyen en la carga mental. Una persona se puede sentir estresada por el ruido, o quizás no soporta el clima y con ello se pierde parte de la agilidad mental para tomar buenas decisiones.
Efectos de la carga mental:
La carga mental tiene muchos efectos negativos, por ejemplo:
- Efectos dañinos sobre la salud:
Demasiada carga mental puede generar alteraciones en el sueño, estados depresivos, ansiedad, daño psicológico, problemas nerviosos, derrame cerebral, infartos, etc. Las consecuencias pueden ser nefastas. Por eso las empresas deben buscar estrategias para mejorar la eficiencia que no pongan en riesgo la salud de los trabajadores, por otro lado los empleados también deben ser conscientes de los perfiles de los puestos y asegurarse que poseen las competencias físicas, psicológicas y técnicas para desempeñarlos.
- Menor productividad:
Someter a los empleados a demasiada carga mental puede ser contraproducente para una empresa, en vez de aumentar la productividad, esta puede disminuir. Es similar a pretender realizar un trabajo con calidad sin dormir varios días, aunque se está puede estar despierto ¿cómo están las capacidades físicas y cognitivas? Obviamente están disminuidas, entonces es mucho mejor tomarse los descansos correspondientes para ser más eficiente. Puede tenerse una jornada muy larga, pero eso debe ocurrir en pocas ocasiones.
- Puede ser una señal de una mala planificación:
Muchas veces la carga mental de trabajo se debe al desorden en la organización de las tareas, donde reina la improvisación. Vale la pena preguntarse ¿cómo puede hacerse esta labor con más eficiencia? Y quizás se descubra que gran parte de las cargas mentales se debían a la escasa planificación.
- La motivación puede verse afectada:
Una persona que todo el tiempo está sometido a una gran carga mental puede comenzar a desmotivarse y perder interés en su trabajo, ya no estará disfrutando su labor, sino que realizar esas tareas será una “carga” como su nombre lo indica. El nivel de responsabilidad personal puede disminuir y finalmente esa persona optará por otro camino.
- Puede ser la causa de una alta rotación de puestos de trabajo y poca estabilidad laboral:
La continua rotación de un puesto de trabajo no es bueno para una empresa, esto trae muchos costos directos y también indirectos. Cada vez que una persona nueva llega, tiene que tomarse un tiempo en aprender y si luego va a salir, igual que sus antecesores, entonces ese perfil no está bien diseñado. Estas condiciones afectan la estabilidad laboral y los empleados sienten esa insatisfacción, lo que al final impacta en el rendimiento.
¿Cómo aliviar la carga mental?
- Analizar el perfil de un puesto de trabajo y cambiarlo si es necesario:
En algunos casos se han analizado todas las exigencias de un puesto de trabajo y se ha llegado a la conclusión que de todas esas tareas salen 3 puestos de trabajo, era obvio que el perfil inicial era inadecuado y por eso la carga mental prácticamente era insoportable.
- Dotar del mejor equipo y tecnología posible:
El uso de un programa de computadora, ya puede ser suficiente para aliviar la carga mental de muchas personas. La apuesta por la eficiencia implica el uso de las herramientas disponibles, hoy en día la tecnología puede realizar muchas labores con mayor precisión que una persona y así aumentar las posibilidades de alcanzar los objetivos empresariales.
- Buscar un plan de incentivos:
Hay labores que son mucho más exigentes que otras, pero si se tiene un plan de incentivos adecuado, de pronto las personas que están sometidas a esa presión saben que sus esfuerzos tienen estupendos beneficios.
- El compromiso de los líderes:
Si los líderes están acompañando de cerca todas las tareas de la empresa y brindan un apoyo incondicional, entonces el clima laboral es favorable para soportar más carga mental y elevar la motivación de las personas.
- Usa un proceso de mentoring:
El mentoring en la empresa ayuda a formar grandes líderes, si existe un acompañamiento sólido por parte de mentores, entonces la carga mental se alivia mucho. Estas personas ya han pasado por estos procesos de formación y pueden dar orientaciones efectivas para que los aprendices puedan cumplir sus objetivos.
- Desde la visión individual se debe hacer un esfuerzo por aprender a manejar el estrés y la presión:
Si quieres tener un gran control de ti mismo y evitar la carga mental, entonces tienes que hacer un gran esfuerzo para poder manejar el estrés, no dejar que la presión te doblegue y acostumbrarte a la disciplina. Si te acostumbras a las respuestas rápidas, entonces notarás como tu vida laboral e individual mejora de manera increíble.