El narcotraficante Carlos Lehder Rivas, extraditado hace más de 28 años a Estados Unidos, envió una carta al presidente Juan Manuel Santos en la que le solicita que intervenga para que se pueda llevar a cabo su regreso a Colombia debido a que supuestamente le están siendo vulnerados sus derechos.
En la misiva recalca las graves violaciones a sus derechos humanos y a los tratados internacionales entre Colombia y Estados Unidos y dice que se encuentra ilegalmente encarcelado en ese país los últimos seis años.
Asegura que cuando colaboró con la justicia en el proceso que se adelantaba contra el general Manuel Noriega, exdictador de Panamá, quedó estipulado en el acuerdo de cooperación que se le cambiaría la sentencia a Lehder para que fuera máximo de 30 años de condena.
Durante la misiva se refiere además a la muerte de Guillermo Cano, director de este diario, quien fue baleado por dos sicarios en una motocicleta al salir de El Espectador y al tratar de hacer un cruce en “U” en su Subaru rojo oscuro de placas AG 5000, para ir hacia el norte donde estaba su residencia.
“En Noviembre de 1986, el expresidente Alfonso López Michelsen por intermedio de su secretario y enlace pidió explícitamente a Pablo Escobar que le solucionara el único obstáculo que tenía para lograr ya, bajo el Gobierno de Virgilio Barco, el pronto retorno de Jaime Michelsen Uribe, a Colombia. El enlace Santiago Londoño White, repitió el único obstáculo era Guillermo Cano y su vigilante diario El Espectador (…) Pablo dijo: López es muy poderoso, nos seguirá protegiendo”, por lo que dice en la carta que Pablo Escobar dio la orden de “quebrarlo”.
Carlos Lehder fue capturado el miércoles 4 de febrero de 1987, en la vereda Los Toldos del municipio de Guarne (Antioquia), junto a 14 personas más, y fue extraditado a Estados Unidos ese mismo día tras la autorización del entonces presidente Virgilio Barco, donde fue condenado a cadena perpetua y 135 años.
Lehder denuncia que no se cumplió el acuerdo de cooperación que decía que su sentencia sería igual o menor que la sentencia del general Noriega pues ya se van a cumplir los 30 años de condena y no fue cambiada su sentencia como quedó plasmado en el acuerdo pues afirma que sí le fue suprimida su condena a cadena perpetua pero le dejaron una sentencia por 55 años.
“El cónsul general de Colombia en New York, en vista de que 55 años de sentencia, bajo cooperación en casos de coca, no existe en el sistema judicial de EE.UU. envió una carta específica al jefe fiscal de mi caso, en Tampa Florida solicitando explicaciones sobre mi situación jurídica y aparente encarcelamiento ilegítimo, en 2009. Hasta hoy seis años después, ni la Fiscalía de Tampa ni Washington han respondido y si totalmente ignorado al sr. Cónsul”, dice la carta del narcotraficante.
Por tal motivo, pide al mandatario actuar frente a la violación de sus derechos y argumenta que en poco cumple 70 años de edad y “merezco morir en Colombia”. (Lea: “Soy hija de un narcotraficante”)
Via:: Colombia