Carmen aparicio lozano, ama de casa y misionera sin fronteras

Por Joseantoniobenito

Querida Carmen:

Ayer, día de la madre, mi pensamiento voló hasta el Yucamani, en Candarave, que tú dibujaste y soñaste como nadie. Te vi colgándole el collar de perlas que adornaba tu corazón. Llevabas tu legión de ocho hijos, decenas de nietos, miles de amas de casas, los millones de seres del planeta que siempre querías hermanar. ¡Qué misión tan gozosa vivimos con tal mamá! Sé que al final tu memoria no pudo con tu corazón y que te fuiste a prepararnos la morada que vivimos en aquel cielo –si lo puede haber en la Tierra- tacneño. Estoy seguro que tus primeras palabras fueron para la Madre, Ella miró a Jesús y abrazándote te dijo: ¡Bravo Aparicio!

Mil gracias

JAB

P.D. Rescato una de tus cartas, 18 años atrás, en la que mencionas al querido P. Eloy Arribas, también en la eternidad. Y comparto simpáticas fotos como la de los caballos del Sr. Guillén, con don Tomás Berdugo, en Candarave y la de la Hermana Miriam, enTarata , o la del camión en la que estás sentada como una reina camino de Copacabana.