Carmena reafirma su liderazgo

Publicado el 19 diciembre 2017 por Felipe @azulmanchego
ESTA ES LA historia de cómo el ‘Gobierno del cambio’ se fracturó a un año y medio de llegar a su primera meta electoral por culpa de Cristóbal Montoro. Los detalles son bien conocidos: el hasta ahora delegado de Economía y Hacienda estampó su firma en el Plan Económico y Financiero (PEF) -el cuarto en dos años- pactado con el Ministerio para que el Ayuntamiento volviera a la estricta senda de gasto impuesta por la Ley de Estabilidad Presupuestaria, pero finalmente Carlos Sánchez Mato (IU) se lo pensó mejor y decidió no tragar con esa imposición en forma de recortes.

Su negativa a acatar el plan de ajustes municipales y su resistencia a aplicar el techo de gasto dejó el terreno abonado para que la alcaldesa adoptara la decisión, que no es descartable ya hubiera tomado con antelación. Antes incluso de que Izquierda Unida exigiera a sus ediles que se ausentaran del pleno.El desafío era de tal magnitud que a Manuela Carmena no le ha quedado otra salida que quitarle las competencias como responsable de las cuentas municipales y dejarlo como concejal raso. "No puedo permitir que el edil de Hacienda no apoye su propia propuesta", argumentó. En política, los grandes liderazgos se construyen sobre la base de este tipo de decisiones.Sánchez Mato es un político entregado ferozmente a la causa de sus ideas, si bien esta vez el desafío en el que se había embarcado -tratar de retorcerle el brazo a Montoro con la regla de gasto- era demasiado titánico como para emprenderlo cuasi en solitario y sin la complicidad de su alcaldesa. Un político atípico, vehemente e impetuoso, al que se le entiende todo lo que dice, que actúa con firmeza y que no se arruga ante nadie, y que ha recibido un serio correctivo que, sin duda, le ayudará a crecer porque, obvio es decirlo, su carrera no se acaba aquí.Los costurones de la herida que su marcha deja en Ahora Madrid serán visibles hasta el final del mandato. Fundamentalmente, porque la crisis interna que se abre ahora tendrá unas consecuencias difícilmente imaginables. Lo que está en juego, no nos engañemos, es la pugna por las listas electorales y la conformación del equipo que acompañará a Carmena en la nueva singladura municipal.De momento, tras las duras críticas de algunas de las plataformas, corrientes internas y familias que conforman Ahora Madrid, como Ganemos (Rommy Arce, Montserrat Galcerán, Pablo Carmona) o Madrid 129 (Guillermo Zapata, Celia Mayer, Javier Barbero), Podemos (Pablo Iglesias e Íñigo Errejón) ha cerrado filas con Carmena mostrándole su apoyo incondicional.

Con su demostración de autoridad, la alcaldesa, de paso, se ha cargado de razones, si es que le hacían falta, para intentarlo de nuevo y repetir como candidata en 2019. Determinación, al menos, no le falta. Y si no, que se lo pregunten a Sánchez Mato. Si consigue recuperar el espíritu fundacional de Ahora Madrid, el de 2015 entorno a una “candidatura vecinal”, algunos no tenemos la menor duda de que el “paraíso” de su jubilación tendrá que seguir esperando. Hay Carmena para rato.