Ideal para reforzar la memoria si partimos del principio clásico “… de lo que se come, se cría”.
Si notas insuficiencia mental, dispersión de ideas, falta de concentración …, no dudes más, corre a tu charcutería favorita y pide que te pongan unos gramitos de este manjar bien fileteado y muy fino y a casa a tomar nota de esta receta que la resuelves volando.
Si después de disfrutar de este plato los problemas persisten, debes de acercarte al médico de cabecera (especialidad médica muy bien traída) para atender tus carencias.
He de confesar que hay muchos que hacemos trampas y nos auto-recetamos esta maravilla, de hecho en estos últimos tiempos que mis bocas cercanas han descubierto este “platito” siempre que van a venir a casa llaman antes y me dicen que les duele la cabeza.
¡Qué pícaras!, pero me encantan.
Adelante con este salvaje con colmillos, nos enlazamos el delantal y a preparar este plato con mucho esmero para que nos quede además de precioso, aún más importante … muy rico.
Empezamos.
INGREDIENTES (para 2 personas): 150 gr cabeza de jabalí, 4 pepinillos en vinagre, pimienta negra recién molida, queso parmesano (o el quemás os guste), 30 gr de frutos secos (nueces o pistachos o …) y aceite de oliva virgen extra.
ELABORACION
Extendemos la cabeza de jabalí en el plato reservando una tajada.
Cortamos la tajada en tiras alargadas (unas cuatro) y empezamos con la primera a enrollarla.
Cuando acabemos seguimos con otra tira y nos queda un pequeño capullo.
A mí con una tajada me han salido 4 tiras y he preparado 2 flores que he colocado en el centro del plato.
Rallamos el queso, molemos la pimienta que espolvoreamos, cortamos los pepinillos y echamos los trocitos extendiéndolos por todo el plato.
Chorrete de una buena aceite, salpicamos con frutos secos y a disfrutar.
Si tienes paté, mételo un ratito antes al congelador y lo rallas también por encima.
Espero que os guste.
Ideal para un picoteo, si no te atreves con las flores, en el centro sitúa unas cebollitas a la vinagreta, con unas aceitunas negras cortaditas y luego el pepinillo y queda también fenomenal.
Si no te gusta el queso, cuece un huevo y rállalo por encima. Queda también muy rico y de aspecto precioso.
Con una buena cabeza de jabalí es muy difícil que no triunfes.