Carrera Litearia-Entrada en el sub-mundo (21)

Por Gfg
Sin embargo, el espíritu literario del escritor-opera-prima se sobrepondrá pronto, en cuanto asuma el desastre y descanse unos meses. Entonces, aconsejado, bien por algún alma caritativa, bien por su propia inquietud, descubrirá un sub-mundo literario todavía sin explotar. Es la red, el ciberespacio, internet, como se le quiera llamar; una realidad virtual en donde las normas no existen, en donde los privilegios son escasos, en donde los requerimientos de entrada resultan nulos, y en donde los escritores fracasados tienen su oportunidad.
Es ahí, en ese refugio de malhechores –¿malhacedores, quizá?– donde el escritor de tercera regional encontrará a sus homólogos y sentirá que no está solo, que puede aportar su creatividad a ese caos absoluto de interrelaciones histéricas.
De repente, como sin quererlo, un abanico de editoriales, revistas, talleres literarios, webs, blogs, facebooks, se expandirá por su firmamento, cada uno con su grado de rigor, especificidad o locura.
Como es lógico, ese sub-mundo es despreciado por todo aquel que publica en el mundo real, en la superficie. Pero eso no le importará al escritor profesional no-nato. También los cristianos tuvieron que refugiarse en sus catacumbas durante décadas hasta que pudieron tomar el control espiritual del planeta (ahora tienen incluso best-sellers propios).
Es en ese sub-mundo donde el escritor-opera-prima se apuntará a un taller de informes de lectura para poder machacar a sus semejantes o donde conocerá en un foro llamado CAMAGUA a escritores de México, Honduras, Colombia, Barcelona o Valencia.
Es en ese sub-mundo donde convivirá semanas con marcopolo, burbuja, síntesis, locotidiano, lady, indy que le brindarán su apoyo y su calor en esos momentos desesperados.
Es en ese sub-mundo donde el escritor comenzará a clasificar su literatura como basura de usar y tirar.