A primeros de este siglo se hace público el proyecto de nuestra Asociación Fuente Cobre de habilitar un túnel por Casavegas que nos metiera en pocos kilómetros en Potes, proyecto para el que los alcaldes de aquella zona y alguno de Asturias ya hicieron un depósito y nuestra Diputación inició un leve contoneo.
Unos años antes, en 1998, redactado por el denominado entonces Servicio de Carreteras Regionales, siendo presidente Juan Hormaechea se conoce el proyecto de un túnel que uniría Campoo con Liébana, un vial de 10 kilómetros entre la carretera de acceso al Chivo (un paso en la intersección de las sierras de Hijar y del Cordel, que viene a sellar el Pico de Tres Mares por el norte) y el mirador de Piedrasluengas. Aunque gustó mucho y fue recogido con interés por Miguel Angel Revilla cuando toma el relevo de la presidencia en 2005, quedó archivado por la crisis, hasta hace poco más de un año que se retoma la idea, aprovechando el tradicional Sermón de la peseta al que asisten once alcaldes campurrianos, que vuelven a poner sobre la mesa el proyecto redactado en 1988 y que atesora como "proyecto estrella", Pedro Luis Gutiérrez, alcalde de la Hermandad de Campoo de Suso.
En el nuevo recorrido allí plasmado se partiría desde la actual CA-916 (Brañavieja-Fuente del Chivo), atravesaría la zona de pistas hasta el lugar conocido como Los Asnos, punto en el que se establecería la boca del túnel. La comunicación es fundamental para el avance de los pueblos.
Revilla es un tío práctico, nacido en Polaciones, otro valle con carencias y desvelos como el nuestro y sabe lo que necesitamos, aunque el Plan de Carreteras aprobado en la pasada legislatura esté cerrado hasta el año 2021.
Se habla, no obstante, de un presupuesto de 11 millones de euros para dotar de nieve artificial Alto Campo, y en los tiempos que corren, se ha de dar prioridad, creo yo, a la reparación de las viejas carreteras, a terminar las obras, y no dejarlo todo en proyecto permanente. Incluso, a aplazar lo de la nieve.
Toda esta parte Cántabra, sobremanera Potes, necesitan aliviar aquel encajonamiento que padecen, sobretodo en verano, y necesitan una salida digna hacia Castilla, antes, insisto, que abrir una nueva brecha en el Peñalabra para enfrentarse a la peligrosa carretera que empieza en nuestro puerto, y que, ellos sí han reparado convenientemente, disponiéndose ahora, aceptado el informe de Impacto Ambiental, a terminar el tramo que queda de Ojedo a Piedrasluengas.
Miguel Ángel Revilla llegó a afirmar en 2007 que no quería morirse sin ver esta obra acabada y como dice un refrán de aquellas tierras "Cuando Cabarga tiene montera, llueve aunque Dios no lo quiera", o sea que, algo veremos.
De la sección "La Madeja", para Diario Palentino, @2017