Esta receta esta hecha con "trampa" y es que las carrilleras las he comprado ya confitadas, es un producto de Cascajares, no se si habéis tenido ocasión de probar algunos de sus productos pero en general son ES-PEC-TA-CU-LA-RES, tienen un surtido amplio de productos cárnicos confitados y una amplia variedad de platos preparados. Si tenéis interés algunos se pueden encontrar en el rincón gourmet del Corte Inglés.
Bueno, pasamos de la publi y nos centramos en lo que nos ocupa, despues de dar unas vueltas a que preparar este fin de semana que teniamos visita de mis suegros finalmente decidimos preparar estas carrilleras que teniamos guardadas y con ganas de hincar el diente. Estuvimos investigando un poco para ver que guarnición le podíamos poner al plato, y dimos con estas patatas que son muy apañadas, muy sencillas de preparar y le han dado un toque simpático al plato, parece que el origen se remonta a un plato que preparaban en el hotel Hasselbacken de Estocolmo en Suecia, el primer restaurante se fundó en 1700!
Ingredientes para 6 personas
2 Cebollas
2 Pimientos verdes
5 Chalotas
2 Zanahorias
2 Puerros3 Dientes de ajoAceite de oliva virgen extra1 Litro de vino tinto1/2 Litro de caldo de carneSal y pimienta6 Patatas
En una olla grande, con un buen chorro de aceite, ponemos toda la verdura picada y los ajos a sofreir a fuego muy lento durante una hora aproximadamente, cuando estén tiernas añadiremos el vino y lo dejaremos hervir unos 15 minutos. Ahora lo pasamos todo por la batidora, si tenéis un vaso batidora de gran potencia no será necesario, pero sino, para que la salsa quede mas fina necesitaremos pasarla por el chino. Devolvemos la salsa a la cazuela y añadimos el caldo, en un primer momento solo hemos añadido un vaso, el resto lo reservamos para que en caso de que la salsa quede espesa podamos aligerarla.
Sacamos las carrilleras de las latas con cuidado, al estar ya confitadas tenemos que manejarlas cuidadosamente para que no se rompan, y las cortamos en cuatro o cinco trozos que los pondremos con la salsa, cuando hayamos acabado con las otras dos las dejaremos hirviendo a fuego lento durante media hora. Personalmente creo que el plato gana si lo dejamos reposar de un día para otro.
Para hacer las patatas hasselback, precalentamos el horno a 200ºC, lavamos bien las patatas, si preferimos las podemos pelar. Ahora las cortamos, tenemos que tener cuidado de no llegar hasta abajo y dejar unos milímetros en la parte inferior para que no se separen las láminas y se nos desmonte la patata, para ayudarnos podemos poner, por ejemplo, un cuchillo plano apoyado en la tabla de cortar y que éste haga de tope cuando cortemos y no lleguemos hasta abajo de la patata. Pondremos las patatas sobre una bandeja de horno huntada con aceite, las salpimentamos y las rociamos ligeramente con aceite, las dejamos en el horno durante 30-40 minutos hasta que estén hechas. Cuando las saquemos, antes de emplatar, les pondremos un poco de mantequilla que se derretirá. Cuanto mas delgadas cortemos las patatas mejor.