Carrusel Bloguero: La veteranía en los jugadores de rol

Publicado el 21 agosto 2012 por Oligbert
El Rol de Siempre Online es el anfitrión del Carrusel Bloguero de juegos de rol de este mes de agosto. El tema elegido es...
La Veteranía en los Jugadores de Rol
Se dice que alguien es veterano en algo cuando ha desempeñado durante un largo tiempo una tarea o tiene mucha experiencia en algo; experiencia conseguida de haber realizado una tarea durante mucho tiempo.
¿Existe ese tipo de veteranía entre los jugadores de rol? ¿Alguien que lleva veinte años jugando a MERP es menos veterano que el que ha jugado a MERP, D&D, FUDGE, BRP y D6 durante sólo cinco años?

La Experiencia
Todos los jugadores de rol nos llenamos de orgullo y satisfacción cuando nuestro personaje consigue la suficiente cantidad de puntos de experiencia como para subir de nivel. Esos puntos de experiencia suelen venir de dos fuentes distintas: las reglas, que te dicen cuantos px deben darte si superas un desafío; y el Director de Juego, que te otorga puntos adicionales según tu interpretación del personaje y lo que hayas aportado en la partida. El primer tipo de puntos es totalmente objetivo, pero el segundo es un tipo de recompensa muy subjetiva que depende de la opinión de dos personas (DJ y jugador).
Es aquí donde vemos qué jugadores tienen ya experiencia en juegos de rol y quienes no. Suelen ser más activos y aplican ideas y soluciones que en otras partidas han sido existosas para conseguir un objetivo concreto. Además, su comportamiento suele ser el que tire del hilo para que otros se lancen sin complejos a interpretar a su respectivo personaje y, al final, la sesión resulte satisfactoria para todos.
Pero, obviamente, el jugador ha recogido todas esas ideas en base a otras partidas. Ha ido aprendiendo o, traducido en términos roleros, ha ganado experiencia. Porque si ganar experiencia con el personaje es importante, más lo es que la gane el jugador para poder emplear esos conocimientos en el futuro, creando personajes más pulidos y potenciados en los aspectos que más utiliza en su modo de juego, u optimizando el gasto de dinero inicial focalizando en ciertos objetos que potenciaran al personaje equilibrando algunos aspecto o maximizando otros.
Así pues, llegamos a la frase que nos decía nuestro abuelo cuando hacía algo que a nosotros nos parecía muy difícil de hacer: “la experiencia es un grado”.

Poco a poco ganamos experiencia

El Legado
Todo eso del jugador que ha jugado mucho y se hace los personajes para que su forma de juego sea todo lo satisfactoria que él quiere, ha abierto puertas de mil formas diferentes y se ha enfrentado a mil monstruos distintos está muy bien, pero mejor está si comparte todo eso en una mesa de juego.
Cuando un jugador experimentado se sienta a la mesa, suele ser objeto de atención por parte de todos. El primero de ellos será, sin lugar a dudas, el DJ. El personaje que está detrás de la pantalla no quitará ojo a sus movimientos, mirará la ficha por si tiene algo que él no había previsto y estará con la mosca detrás de la oreja por si “le armas alguna” en la partida. Los otros jugadores, los que tengan menos experiencia, observarán cada movimiento, cada diálogo y cada tirada para ver qué pueden aprender de ello. Y este es el punto clave.

mmmm... enseñarte podría


Un buen jugador experimentado no llegará a una mesa de juego a chulearse, a llevar el mejor personaje, porque sabe mucho de esto, o la voz cantante en el grupo. El buen jugador experimentado, lo que ya podemos llamar veterano pues ha jugado mil partidas y tiene las tablas suficientes como para no ser un estorbo en la partida sino una ayuda al DJ, aunque el DJ no lo sepa, dejará sitio a los demás miembros noveles de la mesa sirviendo de respaldo para las situaciones que se creen durante la partida. Después, con una cerveza en la mano, en la post partida, seguramente que comente algunos puntos que se podrían haber cambiado o llevado de otra manera, siempre de forma respetuosa e intentando que el otro jugador aprenda de ello y no lo interprete como un ¡zás ,en toda la boca!
El buen veterano enseña a los demás a andar para que en un futuro sean ellos los que enseñen a otros jugadores noveles.
Entonces, ¿qué es la veteranía en los jugadores de rol?
La respuesta es tan sencilla como subjetiva. El veterano es, sobre todo, un amante de lo que hace, y lo que hace es jugar a rol. Se levanta pensando en rol, respira rol (y oxígeno, porque sino muere en 3 asaltos + el bonificador de CON), come rol y sueña rol. Está deseoso de jugar, de enseñar y de aprender porque diariamente surgen nuevos juegos y sistemas y debe aprenderlos o, al menos, conocerlos para seguir engordando su conocimiento.
La veteranía en los jugadores de rol existe, como existe en toda actividad que se practique, pero cuando se habla de esa veteranía deberíamos referirnos más a cómo jugar a rol que a jugar a un juego de rol en concreto. ¿Por qué?. Pues sencillamente porque los juegos de rol cambian, modifican sus reglas e incluso sus ambientaciones, pero la educación en la mesa, el juego en equipo, superar desafíos y hacer de las partidas unas experiencias memorables es algo que no cambia, que se aprende con el paso del tiempo, con el duro trabajo de lanzar dados y preparar partidas, y es aplicable a cualquier mesa en la que nos sentemos independientemente si estamos jugando a MERP o a Cyberpunk.