On 3 de abril de 2013 by femeniname
Querida amiga:
Ya se que has perdido a tu marido, pero no es que lo hayas perdido, es que lo has querido perder, porque ya no le soportabas, ni le amabas, ni compartías nada con él. Ya no recordabas la última vez que disfrutaste con él, la última vez que quisiste compartir un viaje, la última vez que te comprometiste con él. Desde el momento que tomaste la decisión de no quererle más, comenzaste una larga lucha ante las normas, ante la famila, ante los jueces, ante los sentimientos, ante tí misma. Es un duelo sin muerte, es una pérdida constante, un camino largo y oscuro que estás recorriendo. Los papeles, los abogados, los servicios sociales, los suegros, los padres, los vecinos, los profesores, la sociedad. Pero por fin el reloj ya ha cambiado de hora y el tiempo te acompaña. Han tenido que decidir por tí, aunque tú ya habías decidido, tú ya has elegido formar una nueva familia.
Me gusta tu familia plasmada en la última foto que me has enviado por el whatsapp estas vacaciones. Los niños y tú, en un puente de cualquier ciudad, juntos, felices y comenzando con ilusión un nuevo viaje hacia algún lugar que es bonito. En ese instante, tus lágrimas se quedaron atrás, las peleas, la ira, las caídas, el odio, todo se queda atrás porque ya has comenzado otro camino que acabas de elegir. Y me quedo con la imagen de amor que es tu familia, los niños, cuando te miran, cuando te abrazan y te dicen sin palabras “mamá, por fin contigo”.
Te quiere,
Tu amiga