Carta abierta a mi Peque (2 años)

Por Arusca @contrasypros

Queridísimo Peque:

Esta semana cumples dos años. Dos años que has sabido llenar con tus miradas, tus sonrisas y, de un tiempo a esta parte, también con tu lengua de trapo. Sigues teniendo esa complicidad conmigo de los primeros días, pero empiezas a acercarte más a tus hermanos. Te has convertido en su compañero de juegos. Has sabido ganártelos a base de meterte entre ellos, por bruto que fuera el juego, y compartir sus carcajadas. Me encanta ver cómo os desvivís los unos por los otros.

Ya sabes hacerte entender y defender lo que (crees que) es tuyo. Vas teniendo las ideas muy claras sobre lo que te gusta y lo que no. Y aunque a veces tu cabezonería (o perseverancia, herencia de Papá³, todo sea dicho) me ponga de los nervios, lo cierto es que me encanta ver cómo vas formando tu propia personalidad.

Ahora empiezas a buscar más a Papá³, pero sigues arrimándote a mis faldas buscando cobijo. ¡Y yo estoy tan encantada de dártelo! Me llenas el alma con esos achuchones y besos que sólo me das a mí. Bueno, a mí y a tu peluche favorito. Creo que va a acompañarte muchos años.

Eres extrovertido como el Mayor y te encanta subirte a los sitios como al Mediano. Tienes la luz del universo entero en tus ojos y la bondad te inunda el corazón. De mí has sacado esa sonrisa siempre puesta en la cara y sabes usarla para meterte en el bolsillo a quien tú quieras. ¡Menudo pieza vas a ser!

He visto cómo te caías y levantabas, a veces con ayuda y otras tantas sin ella. He visto cómo volvías a intentarlo siempre. He visto cómo juegas con tus hermanos. He visto cómo dabas tus primeras carreras. He visto cómo empezabas a hablar y a decir medias frases. Te he visto aplaudirte con cada logro. Y, ¿sabes qué? Que sigo teniendo ganas de más. Quiero ver qué persona llegas a ser, ésa en la que ya te estás convirtiendo.

Desde este rinconcito de mi mundo (mundo que llenas con tu sola presencia y al que das sentido junto con tus hermanos), quiero desearte un muy feliz cumpleaños.

Te quiero, Peque.