Carta Nº 20
Suelo empezar esta carta comentando que es una tradición y que este año hace ya 20 años. Las cinco primeras las escribía en formato email y se las enviaba a mis amigos para felicitarles el año de una manera más especial. Desde que tengo el blog, la comparto por aquí en la que es la última entrada que escribo del año, siendo la número 47.
En ella hago como un balance de mi año con alguna de mis teorías que se me han ido ocurriendo a lo largo de estos doce meses que despido. Espero que os guste:
******2022
Este año se podría resumir en AGUA. Al inicio, me convertí en sirena para intentar aprender a nadar por las profundidades, pero esta vez disfrutando del proceso. Después de dos años de maremotos de una pandemia que no termina y que no para de dejar secuelas,intentando aprender a respirar bajo el océano, empecé a percibir algo de luz. Mis ojos se acostumbraron a la negritud del fondo y ya vislumbraba las criaturas que allí viven y que nadie conoce. Mientras en el cielo, sobrevolaban medusas gigantes.
Entonces empezó a diluviar.
La mezcla de mis lágrimas con la llovizna provocó el mayor arcoíris brillante que jamás allá visto nunca. Por él, vino un destello en forma de perrita.
Lluvia, que tiene ese nombre por tantos motivos… La lluvia nos alimenta y nos devuelve la vida.
Otro de mis barcos salvavidas sois vosotros, escritores compañeros, alumnos y amigos, que me inspiráis cada día. Hemos hablado de barcos y de llorar hasta ahogarnos. Hemos nadado entre relatos de tormenta y llorado poemas de agua. Hemos llorado de risa y hasta de alegría al ver nuestros libros publicados. Hemos compartido tanto…
Ojalá este año nos espere mucho más de todo eso.
El agua simboliza las emociones y qué soy yo si no un mar de ellas. Soy un pequeñito velero que aspira a aceptar los vendavales, mientras va perdiendo partes; un minúsculo pez que intenta sobrevivir entre grandes depredadores; una pequeña tabla que pretende ayudar a quienes se están ahogando más que yo; una ínfima gotita entre millones que solo quiere ser mejor cada día.
Para este 2023, deseo que logréis superar las tormentas mucho más fortalecidos de como las empecéis. Que tengáis paciencia en la tempestad y momentos Amelie, instantes Kairós, libelúlicos o “me acuerdos” durante la calma. Que sepáis agradecer y valorar cada uno de ellos y a quienes os los brindan, porque ellos son tesoros.
Gracias a todos los que este año me los regalaron a mí,
me esforzaré todo lo que pueda para corresponderos.
¡Feliz 2023!
Las demás cartas:
Carta de despedida 2021 (escritura postapocalíptica)
Carta de despedida al 2020 (la apocalíptica)
Carta de despedida al 2019 (la del eneagrama)Carta de despedida al 2018 (la del minimalismo)
Carta de despedida al 2017 (la de la serendipias)
Carta de despedida al 2016 (la de la sincronicidad)
Carta de despedida al 2015 (la teoría del laberinto)
Carta de despedida al 2014 (creer en uno mismo)