2. DERECHO DE JUGAR COMO NIÑO y de no ser tratado fuera y dentro del campo de juego como un adulto.
3. DERECHO A DISPUTAR COMPETICIONES con reglas adaptadas al nivel de las capacidades del jugador en cada etapa de su desarrollo psicomotriz.
4. DERECHO A JUGAR CON LA MÁXIMA SEGURIDAD POSIBLE.
5. DERECHO A PARTICIPAR en todas las facetas del juego.
6. DERECHO A SER ENTRENADO POR PERSONAS DEBIDAMENTE PREPARADAS.
7. DERECHO A PODER REALIZAR SUS PROPIAS EXPERIENCIAS, resolviendo por sí mismo los problemas que se plantean, tanto en las prácticas como en las competiciones oficiales.
8. DERECHO A SER TRATADO CON DIGNIDAD Y RESPETO tanto por el monitor como por los adversarios y compañeros.
9. DERECHO A JUGAR CON NIÑOS DE SUS EDADES para tener igual de probabilidades de ganar.
10. DERECHO A NO SER NECESARIAMENTE CAMPEÓN.