● Título: Carta de una desconocida
● Título original: Brief einer Unbekannten
● Autor: Stefan Zweig
● Serie: Libro independiente
● Publicación: 2002 (original de 1927)
● Editorial: Acantilado
● Páginas: 72
● Precio: 9 €
"Sólo quiero hablar contigo, decírtelo todo por primera vez. Tendrías que conocer toda mi vida, que siempre fue la tuya aunque nunca lo supiste. Pero sólo tú conocerás mi secreto, cuando esté muerta y ya no tengas que darme una respuesta; cuando esto que ahora me sacude con escalofríos sea de verdad el final. En el caso de que siguiera viviendo, rompería esta carta y continuaría en silencio, igual que siempre. Si sostienes esta carta en tus manos, sabrás que una muerta te está explicando aquí su vida, una vida que fue siempre la tuya desde la primera hasta la última hora."
Carta de una desconocida es, con toda seguridad, uno de los libros (relato, más bien) más populares de Stefan Zweig, y también uno de esos títulos que lleva mucho tiempo en mi lista de deseos. La primera vez que oí hablar de él fue hace algo menos de un par de años, por recomendación de mi profesor de literatura, y aunque he tardado lo mío en cumplir al fin lo he leído.
Pero mi profesor no fue el único en hablarme bien de ése libro, no señor: a la lista hay que añadir a un par de tías mías, una bibliotecaria, una encantadora señora en la parada del bus y unas cuantas blogueras que me convencieron con sus reseñas. Me hablaron de la profundidad que encerraban estas pocas páginas, del arte del autor a la hora de plasmar sentimientos y de lo mucho que me gustaría ésta extensa carta que habla de un amor sin límites, un amor que empezó siendo platónico para una niña pequeña pero que acabó siendo incondicional para una mujer que creció alimentada por la esperanza pese al dolor de no ser correspondida.
No os hablaré con detalle de la vida de ésa desconocida: sería quitarle la magia a sus páginas. Creo que lo mejor será decir solamente que se trata de una carta de despedida, una confesión, escrita por una mujer que nos será desconocida sólo de nombre; una mujer que durante años ha profesado un amor incondicional (casi obsesivo, me parece) no correspondido.
Así, ésta carta se convierte en un pequeño libro muy especial: profundo, humilde y sincero, nos muestra la cara oscura del amor, que no siempre es tan bonito como lo pintan. Zweig nos habla de lo irracional del amor, de lo doloroso y solitario que puede ser. Es una carta que habla de amor, sí, pero también de despecho.
Siendo lo más concisa posible, os diré que el texto es muy bueno. El autor posee una pluma ágil, sencilla y cercana (a pesar de las décadas que han pasado desde que fue escrita), y no es nada difícil ponerse en la piel de ésa remitente desconocida. Y no sólo por la narración del autor, sino también por su habilidad a la hora de perfilar a los personajes principales (ella, que escribe; él, que lee) a través de una carta, pues no es algo sencillo.
Creo que cada lector tendrá una impresión diferente del libro y sacará sus propias conclusiones; algunos verán un amor incondicional, otros verán algo que roza la obsesión, otros sólo el dolor, otros el despecho, algunos una mezcla de todo eso… pero, de una forma u otra, marca. Lo terminé hace unos días y, desde entonces, sigo preguntándome qué pretendía transmitir el autor al escribir Carta de una desconocida; he sacado mis conclusiones, he reflexionado y no he llegado a nada claro, pero la sensación que me ha transmitido (además de todo lo dicho hasta ahora: amor, despecho, dolor,…) es que no siempre amamos a la persona indicada.
Me pregunto si, en la vida real, se puede dar tamaña profesión de amor a alguien que prácticamente no conoce tu existencia; que lo llamen amor verdadero, platónico o poético, me da igual, pero para mí suena demasiado triste e injusto. Irracional, incluso. Son muchas las cosas que me he preguntado desde que cerré el libro y son varias las conclusiones que he sacado, pero la principal es que no creo que se pueda amar así, incondicionalmente, a ciegas, sufriendo en silencio y soledad. Os animo a que le deis una oportunidad (adelante, no os robará más de una hora) y saquéis vuestras propias conclusiones: merece la pena.
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